CLAVE SEMANAL

Esa ciudad de la que usted me habla

Esa corporación de la que usted me habla se gusta cuando destruye. La institución se da de bofetadas en la cara de los ciudadanos. Hasta Cáritas pide paz. Al menos para retirar las víctimas.

Lunes, 21 de mayo | Arreglando la escalera al cielo

Casi siempre, pero sobre todo esta semana, el despiporre institucional del Concello de Ourense se ha mostrado más lozano y vivaracho que nunca. Aunque lo parezca los periódicos no viven de los titulares a cuatro o cinco columnas, ni siquiera del selecto grupo de asuntos que conforman la portada. Una simple columna abre varias reflexiones. Esta del lunes, por ejemplo: "Los bomberos urgen arreglar cuanto antes su autoescalera". Dos meses lleva en Madrid el artefacto en espera de arreglo y el gobierno local dice que están "trabajando en ello", como Aznar, pero sin acento chicano. El expresidente del Gobierno había estado "toda la noche trabajando en ello" con George Bush, sin que se sepa muy bien el alcance de sus desvelos. La escalera de los bomberos es la que permite auxiliar en altura en caso necesario. Pero está averiada y los bomberos dicen que ojocuidado en el supuesto de una emergencia. No es la escalera al cielo de Led Zeppelin, únicamente un equipo de tantos que dependen del Concello y requiere mantenimiento. La canción del histórico grupo de rock británico arranca diciendo que "hay una dama que está segura de que todo lo que reluce es oro y está comprando una escalera al cielo". En la ciudad y su mantenimiento, ya no digamos en el decoro político, no brilla ni el oropel. Válganos el cielo. Con o sin escalera.


Martes, 22 de mayo | Entre el despendole y el despelote

Joaquín, el hilarante jugador del Betis, dijo en el 2006, cuando estaba yéndose hacia la puerta de salida de la Selección que el conjunto "es un despelote y un caos y ya ni Luis (Aragonés) sabe por donde tirar". Algo parecido pasa con la institución municipal ourensana, reeditándose en su peculiar despendole. Con el café de la mañana, la lectura de alguno de sus principales asuntos nos lleva a reparar que "la oposición del Concello de Ourense bloquea al PP la única vía factible para aprobar los presupuestos". En la información nuevos argumentos para concluir que esta corporación es una auténtica pesadilla, en las antípodas de las urgencias urbanas. Con el periódico ya leído, se impone atender a las obligaciones cotidianas. Entrada a la ciudad por Os Remedios: parterres amarillos por falta de riego, huérfanos de planta de temporada, hierba sin segar. Pasa un autobús urbano ya con más pegatinas que el baúl de la Piquer. Unos contenedores subterráneos siguen clausurados, años después. Atravesando alguna calle del casco histórico las pintadas y lo desaseado del conjunto nos llevan a cuestionar la teoría de Darwin sobre la evolución de las especies. De salida hacia las zonas de ocio la hierba tiene un metro de altura y el entorno termal está lejos de ser la publicidad que le hacemos. Del pleno del Concello salieron todos ufanos reivindicándose cada uno en su puestiño. La ciudad a la que dicen representar, desaseada, dejada, triste. Joaquín, el del Betis, dijo que la selección era el despelote pero dos años después Luis Aragonés y el equipo ganó el Europeo y luego vendría el Mundial. Esta selección de 27 concejales algún día ganará algo pero a un año de las elecciones no le meten un gol ni al arco iris.


Miércoles, 23 de mayo | Fórmulas para buscar la paz

Sé fuerte, Luis. Mira que no dio de sí aquel mensaje telefónico de Rajoy a ese señor del que usted me habla. "Oye, contad con DO para cualquier votar urgencias en trámite urgencia" (sic), que aparece en otro mensaje telefónico en el terminal de ese concejal del que usted me habla. Encriptado, sin duda, como se deben transmitir los asuntos de enjundia, las tesis que desvelan enigmas. La adolescencia política tiene estas cosas. Es la gestión, la gobernanza y el interés público, que ahora se llevan a base de emoticonos. Las relaciones políticas en el Concello de Ourense hace mucho que son un campo minado. En realidad, son un cenagal. Un día después del pleno del bloqueo de los presupuestos los diferentes actores de la comedieta abundaban ante la prensa en sus razones para no entenderse. Al alcalde solo le falta reproducir aquella frase de Fraga, en el 2003, increpado en un acto público en Santiago: "¡Que pasen los antidisturbios!" El regidor, sin duda menos vehemente y más moderado, adoptará otra medida para hacerse respetar ante estos concejales de los que usted me habla. Pedirá la mediación de los cascos azules de la ONU. Y aún así...

Jueves, 24 de mayo | “Estamos cansados de los retrasos"

Lo pide hasta Cáritas. Piden consenso al menos en lo básico, pero tampoco. Los pobres de Ourense son cada vez más pobres, advirtieron sus responsables en la presentación de la Memoria del 2017. Ángel Feijoo, el delegado, lo dijo clarito y alto para que se le oyese y entendiese. "Estamos cansados (del Concello de Ourense) de los retrasos en los pagos, algo que padecen las personas más necesitadas". La institución municipal no soltó un euro desde comienzo de año pese a tener firmado un convenio para el comedor social.  Pero, la institución llevaba días felicitándose porque el martes empezaba la reposición de unas losetas y había un no sé qué en los semáforos. Y también se fue de fiesta por Santa Rita.
 
Viernes, 25 de mayo | Refrán del remedio y la enfermedad

Y   también en Ourense se desentierra el hacha de la moción de censura. Tienen que disculpar, pero no recuerdo muy bien cómo era el refrán del remedio y la enfermedad. 

Sábado, 26 de mayo | “Cine, cine, cine, más cine por favor"

El propio Concello pone en un brete su Festival de Cine y peligra su continuidad. Sumidos en la profunda nostalgia de padecer esta ineptitud, solo nos queda invocar los versos y la canción de Aute: "Recuerdo bien aquellos «cuatrocientos golpes» de Truffaut, el travelling con el pequeño desertor, Antoine Doinel, playa a través, buscando un mar que parecía más un paredón". 

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