José Manuel G.M. tiene una cita pendiente en el Juzgado de lo Penal 2 por un delito de maltrato familiar.
El fiscal acusa al joven de propinar un puñetazo en la cabeza y una bofetada a su madre por un hecho tan intrascendente como cambiar el canal de televisión cuando estaban en el salón de la casa familiar de A Valenzá (Barbadás).
En el momento de los hechos, sucedidos en torno a las diez de la noche del día 1 de febrero de 2011, el inculpado fue víctima de una alteración explosiva asociada a circunstancias estresantes de tipo socio-laboral con rasgos psicóticos.
El joven, según relató su madre, vive con ella desde hace cinco años y depende económicamente de la cabeza de familia. Una posibilidad que ya no sería posible si prospera la petición de pena del ministerio fiscal en tanto que reclama, además de dos meses multa, a razón de tres euros al día, la prohibición de acercarse al domicilio de la progenitora a una distancia inferior a 300 metros durante dos años. Añade la obligación se seguir un tratamiento psiquiátrico externo durante cinco años.
Según la versión de la denunciante, el acusado no sólo no dio explicación sobre su comportamiento sino que impidió que la madre se fuera de casa, agarrándola por un brazo. El inculpado depuso su actividad cuando la mujer comenzó a gritar y su vecina acudió en su auxilio.
La denunciante, según confesó, no es la primera vez que recibe bofetadas o empujones de su hijo, pero sin precisar atención médica. Según su testimonio, en alguna ocasión manifestó a su hijo que deseaba que abandonara la casa pero, en esos supuestos, la agresividad hacia ella es mayo con más amenazas.
El miedo de la denunciante es tal que incluso tuvo que recibir tratamiento médico con antidepresivos.
