Vigilancia Aduanera registró su casa de Ourense y propiedades de su pareja en Verín y Castrelo

De Lara investiga bienes del exalcalde Francisco Rodríguez

Registros en el piso del exalcalde socialista de la ciudad Francisco Rodríguez y en propiedades a nombre de su pareja, Mercedes Astorga, en los municipios de Verín (de donde ella es natural) y Castrelo do Val, devolvieron por unas horas el protagonismo de la Operación Pokemon -la que investiga el pago de sobornos a políticos a cambio de la concesión de obras y servicios públicos en Galicia- a Ourense.
Porque agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera llamaron a primera hora de la mañana -para asegurarse de que el exalcalde y su compañera estaban en el domicilio- a las puertas del piso del barrio de A Ponte en el que residen para requisar documentación de tipo personal, relacionada especialmente con la hipoteca de la vivienda y con escrituras o documentos de propiedad de otros posibles bienes patrimoniales. Según algunas fuentes, incluso se incautaron de sus teléfonos móviles.

Los agentes se desplazaron posteriormente a Verín y Castrelo do Val, donde la compañera de Francisco Rodríguez y su familia tienen algunas propiedades, de las que también se habrían llevado documentación personal de ambos.


ANTECEDENTES

Los registros los efectuaron los agentes cumpliendo órdenes de la titular del Juzgado número 1 de Lugo, Pilar de Lara, que instruye el caso iniciado con la conocida como Operación Pokemon por la que el exalcalde fue detenido e incomunicado durante tres días el pasado mes de septiembre, momento en el que la instructora decretó el secreto del sumario, que aún no se ha levantado, con el consiguiente enojo para el rosario de políticos, funcionarios y empresarios imputados en el caso. Fuentes consultadas por este periódico han precisado que, pese a que en un primer momento, en septiembre pasado, la jueza no consideró necesario practicar registros en las propiedades de Rodríguez y de su compañera, declaraciones posteriores, incluso recientes, de otros imputados habrían aconsejado efectuarlos ahora.

El exalcalde está imputado en la causa por cohecho y prevaricación y le fue impuesta una fianza de 6.000 euros para salir en libertad, tras declarar ante la jueza. Rodríguez, que se reincorporó a su puesto de profesor en O Carballiño tras abandonar la Alcaldía, sufrió recientemente un problema de salud del que se está recuperando. Su compañera sigue trabajando en la concesionaria de aguas, Aquagest, también investigada por la jueza de Lugo.

Te puede interesar