PP y PSOE parten con ventaja en Ourense en las generales, lo que contagiaría los resultados de las locales
Con las elecciones generales a las puertas, el panorama de fragmentación y multipartidismo sigue dibujando una indefinición en la que nadie es capaz de hacer pronósticos claros . La multiplicidad de opciones, la proximidad de dos citas electorales y la participación serán más claves que nunca.
La división de la derecha
"A división da dereita e as tensións internas do PP nacional, que se proxectan tamén no escenario municipal, pode interpretarse como unha reorientación e crecemento da propia dereita", señala Mónica López Viso, profesora doctora en Ciencia Política en el Campus de Ourense. Cree que la sensación es que PP, Ciudadanos y Vox presentan un discurso que "parece converxer día a día", lo que podría impulsarlos a alcanzar una mayoría y acabar así por reforzar finalmente a los populares.
Voto útil
Este empuje de la derecha en una provincia donde tradicionalmente el PP ha sido vencedor pone sobre la mesa la cuestión del voto útil, Ourense es una de las circunscripciones pequeñas "clave" en las elecciones, por los votos que se pueden desviar a Cs o Vox sin transformarse en escaños.
López Viso asegura que el voto útil "reforza, indirectamente, os efectos mecánicos e reductores da fragmentación do noso sistema electoral, que en termos xerais producen unha sobrerrepresentación dos partidos máis votados". Esto, en la práctica, invita a pensar que solo PP y PSOE aspiran a transformar sus votos en diputados. Esto podrá llevar a muchos a "adaptar" su decisión de voto, "e votar unha segunda opción coa que non se senten tan próximos pero que sospeitan que si ten posibilidade de conseguir escano".
La magnitud media de escaños por provincia es "considerablemente baixa", explica Viso. De hecho, es de 6,7 escaños por provincia, lo que arroja una "gran variabilidade" –Madrid o Barcelona eligen 30, frente a cuatro de Ourense–. La proporcionalidad que sí existe en provincias populosas desaparece en la ourensana. "A fórmula D'Hondt non produce efectos proporcionais por baixo dos seis escanos, e comporta que en Ourense o resultado adopta perfís claramente maioritarios". En los últimos 30 años, solo se rompió el bipartidismo una vez, en 2015, lo cual hace que los ourensanos "non necesiten coñecer os mecanismos de tradución de votos para poder intuír as escasas posibilidades de que unha terceira formación teña representación".
Unión de fuerzas
La unión entra formaciones cercanas–visible en Navarra, donde PP, Cs y UPN se presentan en conjunto de cara al Congreso y el Senado– hace que una pregunta sobrevuele la cabeza de muchos votantes. ¿Convendría hacer eso en Ourense, a derecha e izquierda? Esta doctora de Ciencia Política cree que la unión es una "estratexia clave" en una provincia pequeña, y sostiene que los partidos, especialmente en la izquierda, deberían "sumar e converxer cara a unha aposta unívoca", ante el crecimiento de fuerzas más conservadoras, como Vox. Lo ve difícil, pero sostiene que, al menos, deben apostar por una "estratexia de mobilización y tomar ejemplo de la fuerza del feminismo.
Efecto contagio
La participación en Ourense tras 13 elecciones legislativas y 10 municipales ha sido siempre más alta en las primeras, pero la cercanía en esta ocasión entre los dos procesos podría producir una movilización más igualada, algo que vendría a reforzar a partidos mayoritarios frente a los pequeños. "Os niveis de mobilización nas municipais seguiron unha evolución irregular na cidade, ligada ao clima máis ou menos participativo, derivado da conxuntura política", apunta López Viso. Hubo dos municipales especialmente participativas (1995 y 2011), frente a las desmovilizadoras de 1987 o 1999, en línea con el nivel de movilización nacional.
Así, "que se trate dun proceso case simultáneo, pode implicar un efecto contaxio do ambiente político nacional sobre o municipal, onde ademais os apoios dos partidos de ámbito nacional son predominantes (PP y PSOE) fronte a forzas de menor tamaño (BNG, OueC o DO)".
