El repunte de las reyertas callejeras violentas detectado por las fuerzas policiales en la ciudad en los últimos meses fue abordado ayer en una reunión mantenida entre el subdelegado del Gobierno en la provincia, Roberto Castro, y el alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez.
Ambos, junto al comisario del Cuerpo Nacional de Policía, Ángel Barrera, y el superintendente de la Policía Local de la ciudad, Abelardo Ulloa, hicieron un análisis del estado de la seguridad ciudadana en los barrios de la capital, tras constatar estos cuerpos policiales una mayor conflictividad en las cercanías de, al menos, tres céntricas discotecas.
Preocupan especialmente, tal y como ya adelantó La Región y confirmó ayer Roberto Castro tras el encuentro, los alrededores de los locales de ocio nocturno Azabache, Zona Cero y Discoteca Latina, todos en pleno centro de la ciudad, tanto por la sucesión de altercados que se producen en sus inmediaciones como por los eventuales excesos en los niveles de ruido que se puedan registrar en las calles en las que se ubican, las que concentran más pubs.
Por todo ello, en palabras de Roberto Castro, 'acordamos redoblar esforzos ao redor destes sitios e estar máis presentes policialmente', dado que, indicó, 'o obxectivo é dar o mellor servizo posible ós cidadáns logrando un equilibrio entre o dereito a divertirse e o de descansar'.
Más categórico se mostró el máximo responsable de la Comisaría Ourensana, Ángel Barrera, al asegurar que en la reunión se estipuló 'levar a cabo un maior control policial nas zonas máis problemáticas, vixiando tamén os horarios de peche dos locais que abren ata máis tarde'.
Asimismo, según afirmó Barrera, la mayor presencia policial no sólo vigilará de forma especial los alrededores de las tres discotecas, sino también la zona de los vinos, y se notará en mayor medida los fines de semana.
El alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, indicó que la reunión pretendía ser 'unha posta en común' para 'analizar la problemática nos arredores de determinados locais', así como contribuir a 'mellorar a efectividade policial nos lugares do centro onde máis se precisa con unha maior coordinación'.
Preocupan especialmente, tal y como ya adelantó La Región y confirmó ayer Roberto Castro tras el encuentro, los alrededores de los locales de ocio nocturno Azabache, Zona Cero y Discoteca Latina, todos en pleno centro de la ciudad, tanto por la sucesión de altercados que se producen en sus inmediaciones como por los eventuales excesos en los niveles de ruido que se puedan registrar en las calles en las que se ubican, las que concentran más pubs.
Por todo ello, en palabras de Roberto Castro, 'acordamos redoblar esforzos ao redor destes sitios e estar máis presentes policialmente', dado que, indicó, 'o obxectivo é dar o mellor servizo posible ós cidadáns logrando un equilibrio entre o dereito a divertirse e o de descansar'.
Más categórico se mostró el máximo responsable de la Comisaría Ourensana, Ángel Barrera, al asegurar que en la reunión se estipuló 'levar a cabo un maior control policial nas zonas máis problemáticas, vixiando tamén os horarios de peche dos locais que abren ata máis tarde'.
Asimismo, según afirmó Barrera, la mayor presencia policial no sólo vigilará de forma especial los alrededores de las tres discotecas, sino también la zona de los vinos, y se notará en mayor medida los fines de semana.
El alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, indicó que la reunión pretendía ser 'unha posta en común' para 'analizar la problemática nos arredores de determinados locais', así como contribuir a 'mellorar a efectividade policial nos lugares do centro onde máis se precisa con unha maior coordinación'.
