Las fuerzas de seguridad han investigado a ocho personas por intrusismo profesional en la provincia en el último año. Entre las profesiones afectadas, detective privado, taxista, veterinario y dentista. En este último caso hubo detención.
Ocho personas fueron investigadas durante el último año por las fuerzas de seguridad por intrusismo profesional. Las pesquisas se llevaron a cabo en colaboración con la Xunta de Galicia y los distintos colegios profesionales.
Los implicados ejercían, respectivamente, de maestro, veterinario, taxista (cuatro), detective y dentista. Este último, identificado como A.A.L., de 52 años, fue detenido a principios de mes en Trives –es donde tenía la mayor parte de la clientela– y estos días está siendo a llamar a declarar en los juzgados de instrucción 1 de Lalín, el 2 de Ourense y 4 de A Coruña, que tienen diligencias abiertas, aunque posteriormente solo uno llevará el asunto.
Este hombre, según fuentes del Instituto Armado, ya fue investigados hace tres años por ejercer de taxista sin tener la correspondiente licencia.
A las otras siete personas que han sido investigadas se les abrió un expediente sancionador (en la actualidad están siendo tramitado) cuya resolución podría conllevar sanciones que van desde los 600 a los 3.000 euros.
Los agentes iniciaron la investigación después de que fueran alertados por colegidos profesionales, empresas e incluso taxistas a título particular al ver afectada su cartera de clientes.
Y en todos los casos, los investigadores hicieron un seguimiento de los supuestos intrusos hasta comprobar que no tenían licencia, ni título, para ejercer la profesión.
Eso sí, todos ellos, según fuentes de la investigación, una vez puestos al descubierto se apartaron de las tareas que realizaban.
Guardia Civil y Policía Nacional comprobaron que durante el ejercicio de la profesión, salvo el dentista detenido en Trives, no habían ocasionado grave daño a sus clientes.
El investigado por detective se identificaba como trabajador de una empresa debidamente autorizada y con profesionales para ejercer legalmente la profesión. No es la primera vez que una persona ejerce de detective en la provincia sin tener la correspondiente titulación, dado que el Juzgado de lo Penal de Ourense condenó a principios de mes a otro hombre por intrusismo en este oficio.
En el caso del maestro, según pudo saber este periódico, impartió clases durante unos meses en un colegio privado de la ciudad, mientras que el que ejercía de veterinario trabajaba en pueblos del medio rural. Los taxistas operaban en las comarcas de Monterrei, A Limia y Celanova.
Estafa y daños
El falso dentista de Trives comparece estos días en los citados juzgados para responder por delitos de estafa, al ser denunciado por laboratorios por adquisición de material dentario que no llegó a pagar, por intrusismo y por daños contra la salud, dado que algunos de sus clientes, según fuentes del Instituto Armado, sufrieron lesiones irreversibles. El acusado llegó a sacar tres dientes en una operación a un albañil en la propia obra en la que estaba trabando. Desinfectaba el material con lejía.
