La empresa crece en el Polígono San Cibrao y cuenta hoy con cien empleados más que en el 2015
Rodríguez López Auto, empresa ourensana que lidera el mercado español en la adaptación de vehículos para ambulancias, está en pleno proceso de expansión. Para ello ha programado un ambicioso programa de inversiones, que llegan a 1,5 millones de euros, lo que le permitirá seguir creciendo, incluso batiendo cifras récord. Así lo confirma José Enrique Rodríguez, gerente de la firma que se ubica en el polígono de San Cibrao das Viñas.
La compañía transformó durante el pasado año 980 ambulancias —entre cuatro y cinco por día laborable—, un registro nunca antes alcanzado, anticipo de las 1.200 que pueden fabricar este año. Paralelamente, el número de trabajadores ha crecido de forma exponencial desde los 130 que tenían en el 2015 a los 240 del pasado ejercicio. Las operaciones formalizadas también han disparado la cifra de negocio hasta los 20 millones de euros, frente a los 16,5 millones del 2016. La estimación que hace la compañía es crecer este año un 15%.
Todas estas magnitudes están dentro de un ambicioso plan de inversiones y mejora de instalaciones y procesos. Rodríguez López Auto ganará en breve 3.000 metros cuadrados más en unas dependencias que eran de la fábrica de colchones Aspol. José Enrique Rodríguez confiesa que su empresa "tiene en estos momentos muchísima carga de trabajo", de ahí que hayan encarado varios proyectos.
"En tres o cuatro meses estará concluida la nueva área de control de calidad final y entrega al cliente", avanza el gerente. Han invertido unos 350.000 euros en una máquina que se incluirá en una nueva línea de producción de 25 metros para la elaboración de tableros de plástico "muy ligeros y muy resistentes al impacto", como indica Rodríguez. Estas piezas se ensamblarán en las ambulancias, pero también se pueden usar en embarcaciones o autocaravanas. Esta máquina llegará en los próximos días y podría estar operativa a partir de marzo. Además, la empresa incorporará una termoconformadora y una mecanizadora, un sistema de cableado automático, y otra máquina con capacidad para producir 20.000 componentes electrónicos a la hora.
Con estas incorporaciones la empresa ganará en capacidad de producción y autonomía, al reducir su dependencia de proveedores externos.
"Estamos en el mercado, estamos en el partido", destaca el gerente de la firma ourensana, que valora el salto cualitativo que han dado en los últimos años, "fortalecidos con la crisis". Reconoce que la carga de trabajo ha crecido en el último año, sin dejar de advertir que "este es un negocio muy fluctuante".
Aliados con Volkswagen para un pedido de Cruz Roja en Costa Rica
El gerente de Rodríguez López Auto se encuentra estos días en Costa Rica donde negocia un contrato de 200 ambulancias para Cruz Roja. En las conversaciones también participa uno de los ejecutivos de América Latina de la multinacional alemana Volkswagen, que actúa como partner de la compañía ourensana. El concurso de Costa Rica es solo uno de los posibles negocios que pueden cuajar a medio plazo y que supondrían mantener una importante carga de trabajo para la carrocera ourensana. Hispanoamérica es en estos momentos un lugar estratégico para los nuevos pedidos y "el mercado natural", como reconocer José Enrique Rodríguez. Ecuador, Colombia, Perú o Chile son otros países clientes de la empresa ourensana.
La exportación supone casi el 50% de la producción, después de la apuesta de internacionalización que han hecho en los últimos años. Vehículos adaptados por Rodríguez López Auto están en instituciones sanitarias europeas en países como Francia, Gran Bretaña, Alemania, Suecia o Eslovaquia, para donde han salido 45 recientemente. En la cartera de clientes también están Marruecos, Egipto o Irán.
Según los planes que adelanta el gerente de la firma, fortalecer el mercado internacional seguirá siendo prioritario a medio y largo plazo.
