La provincia ha pasado, en menos de una semana, de registrar precipitaciones en forma de nieve en zonas de montaña como Manzaneda -el pasado lunes- a anotar más de 25 grados de temperatura máxima en prácticamente todas sus localidades.
Así lo han asegurado ayer fuentes de Meteogalicia al poner de relieve que una masa de aire africano, cuyos efectos se notarán hasta el próximo martes en Ourense, hizo subir el mercurio exactamente 13,5 grados sólo en la ciudad desde este lunes, al registrar ayer los termómetros una máxima en la capital de 31,8 grados (18,3 hace cuatro días).
La influencia de este aire cálido, que dejó ayer una multitud de estampas estivales en la provincia, hizo, según las mismas fuentes, que el ascenso térmico supusiese un perceptible aumento de más de 10 grados en muchos puntos de la provincia. De este modo, mientras que las zonas bajas del Miño-Sil anotaron ayer entre 29 y 31 grados de máxima, zonas intermedias en altitud como Xinzo rondaron los 28. Por contra, las áreas de montaña como Manzaneda llegaron ayer, pese a su altitud, a los 20 grados.
Desde Meteogalicia, debido a ello, indican que 'pasamos do inverno ao verán en menos dunha semana', al precisar que las temperaturas estuvieron durante el mes de abril y principios de mayo en Ourense por debajo de los umbrales habituales mientras que, ahora, sin embargo, 'están por enriba'.
En otros lugares de la provincia, como en Verín, se alcanzaron ayer los 30,7 grados (a las 18 horas). Más bajas fueron las máximas que anotaron sobre esa misma hora Rubiá (28,2), Entrimo (26,4), Viana do Bolo (26,3), Vilariño de Conso (25,3), Maceda (25,2) o Muíños (23,5), según los valores registrados en las estaciones de Meteogalicia.
Las previsiones de sus meteorológos para hoy, así como para este fin de semana indican, nuevamente, que las jornadas marcadas por los valores máximos en umbrales veraniegos serán la tónica habitual. Así, para esta misma jornada se prevé que en la ciudad se vuelvan a superar los 31 grados, mientras que otros puntos como Verín lleguen a los 30. Mañana y el domingo, según espera Meteogalicia, la ciudad no se volverá a librar del calor, ya que en estas dos jornadas se espera que el termómetro marque 30 grados.
La influencia de este aire cálido, que dejó ayer una multitud de estampas estivales en la provincia, hizo, según las mismas fuentes, que el ascenso térmico supusiese un perceptible aumento de más de 10 grados en muchos puntos de la provincia. De este modo, mientras que las zonas bajas del Miño-Sil anotaron ayer entre 29 y 31 grados de máxima, zonas intermedias en altitud como Xinzo rondaron los 28. Por contra, las áreas de montaña como Manzaneda llegaron ayer, pese a su altitud, a los 20 grados.
Desde Meteogalicia, debido a ello, indican que 'pasamos do inverno ao verán en menos dunha semana', al precisar que las temperaturas estuvieron durante el mes de abril y principios de mayo en Ourense por debajo de los umbrales habituales mientras que, ahora, sin embargo, 'están por enriba'.
En otros lugares de la provincia, como en Verín, se alcanzaron ayer los 30,7 grados (a las 18 horas). Más bajas fueron las máximas que anotaron sobre esa misma hora Rubiá (28,2), Entrimo (26,4), Viana do Bolo (26,3), Vilariño de Conso (25,3), Maceda (25,2) o Muíños (23,5), según los valores registrados en las estaciones de Meteogalicia.
Las previsiones de sus meteorológos para hoy, así como para este fin de semana indican, nuevamente, que las jornadas marcadas por los valores máximos en umbrales veraniegos serán la tónica habitual. Así, para esta misma jornada se prevé que en la ciudad se vuelvan a superar los 31 grados, mientras que otros puntos como Verín lleguen a los 30. Mañana y el domingo, según espera Meteogalicia, la ciudad no se volverá a librar del calor, ya que en estas dos jornadas se espera que el termómetro marque 30 grados.
