El exconcejal de Deportes, Fernando Varela, negó en su declaración haber recibido dinero ó regalos de parte de Vendex a cambio de información privilegiada para la concesión del contrato de limpieza del Pabellón.
El exconcejal del BNG dijo haber conocido a Adrián Cordero en el año 2007, cuando era edil de Seguridad Ciudadana. 'Se dirigía a mí para pedir que se ampliara la ORA, porque no cumplían objetivos, pero nada más. Después comí una vez con Tutor y Cordero; no, una no, fueron dos en cinco años en el restaurante Galileo, y el motivo fue ampliar las plazas de la ORA. Porque creo recordar que desde que no fui concejal de Tráfico, no comí más con ellos'.
Negó haber facilitado información privilegiada sobre el concurso de licitación de la limpieza del Pabellón: 'Era imposible porque yo no conocía las condiciones de la contratación', y de haber pedido regalos o dinero para favorecerlos así como de haber recibido oferta alguna, 'que me conste no, no sé si indirectamente o tal , pero no me consta'.
En una declaración marcada por largos silencios y suspiros, Fernando Varela afirmó no haber recibido nunca un pago de 6.000 euros, tal y como le preguntó la jueza tras leerle una conversación mantenida entre Adrián Cordero y José María Tutor en la que sostienen que el exconcejal 'les ha pedido un pago'. 'No, no, o se están equivocando de persona o están intentando involucrar al Bloque, o no sé', insiste Fernando Varela. La juez señala que la entrega del sobre, según las declaraciones de Cordero, se hizo por Tutor en una cafetería. 'No, no, yo nunca estuve con Tutor (silencio) solo. Siempre estuve con Adrián', replica. La juez le subraya que 'yo no dije que estuviera Tutor solo, sino que fue quien le entregó el sobre'.
En cuanto al registro efectuado en el grupo Vendex, la juez destacó un recibo en el que constaba una gratificación de 3.600 euros que Cordero habría entregado a Varela para la campaña electoral. Tras un silencio, el exedil insistió en que 'no, no, niego completamente eso'.
Respecto a posibles regalos, Varela aseguró en su declaración que 'intentaban siempre llegar regalos a la Concejalía de Tráfico y mi secretaria y yo siempre los rechazábamos, llegaba un regalo a casa, y lo mismo.' La juez le informa sobre un listado en el que se anotó la entrega, en 2008, de un reloj Omega de una joyería y en el 2009, de uno de Cuervo y Sobrinos: 'Ya, ya, intentarían, pero en mi casa no entró'. Ante la pregunta de la juez por el fin de esas manifestaciones, Varela afirmó que 'lo único que puedo pensar es que si utilizaban mi nombre para intentar hablar de otra persona; no, no sé, de verdad; es que lo único, es que, el contacto que tuve fue este último contrato. De la ORA sólo hablaban conmigo para ampliar. Yo les decía que imposible, y me presentaban proyectos y después ya en el Pabellón me limitaba a darles quejas a ellos, quejas de una trabajadora'.
