Un hombre de A Rasela (Verín), Manuel Jiménez, fue detenido por como presunto autor del robo de 15 toneladas de leña de chopo a un vecino de la misma localidad que había denunciado el 5 de marzo la desaparición de la madera, que almacenaba frente a su casa, al regresar de un viaje de Brasil. El detenido ubicó los troncos frente a su domicilio y la Guardia Civil cree que contó con ayuda de más personas, una hipótesis que investiga. El caso genera sorpresa en A Rasela pues son muchos kilos de leña.
Manuel Jiménez, vecino de A Rasela (Verín) de 34 años, fue detenido como presunto autor del robo de 15 toneladas de leña de chopo que un vecino de la misma localidad, José Luis Rodríguez, de 51 años, apilaba en el exterior de su casa.
El propietario de la leña presentó una denuncia por la desaparición de los troncos el pasado 5 de marzo, argumentando que acababa de regresar de un viaje a Brasil y se topó sin la madera, cuyo coste valoró en 800 euros.
Fuentes de la Guardia Civil señalaron que los agentes realizaron una inspección ocular por la zona y descubrieron que había leña de similiares característica a la robada frente a la vivienda del detenido en A Rasela. Tras las correspondientes pesquisas, comprobó que el detenido no supo explicar la procedencia de la leña.
La Guardia Civil sospecha que el detenido contó con colaboración para, supuestamente, desplazar la leña en un camión hasta su domicilio, una hipótesis que está investigando.
Sorpresa
El caso generó sorpresa en A Rasela. Vecinos consultados afirman que el propietario de la leña la guardaba frente al domicilio dende hai polo menos dous anos y señalan que lo curioso es que hace falta un vehículo de grandes dimensiones para cargar las 15 toneladas y ninguén se decatou de nada o día que desapareceu. Otros señalan que a casa queda nun extremo do pobo e de aí que sexa máis difícil levar a cabo o roubo. La leña todavía no fue recuperada por el propietario, a la espera de lo que determine la juez que le tomó declaración.
Tres empresas de la provincia sufren robos de material por 12.500 euros
Diversas empresas de la provincia están sufriendo robos de material, algo que desde la Subdelegación del Gobierno no atribuyen a ninguna banda organizada, sino más bien al hecho de que dichas empresas se encuentren aisladas de zonas habitadas o por donde pasen habitualmente los vecinos.
De hecho, en Lebozán (Beariz), un técnico de mantenimiento de la estación meteorológica de esta localidad, Celestino V.V., denunció ante la Guardia Civil que entre el 15 de diciembre de 2008 y el 15 de marzo de este año autores desconocidos sustrajeron un tanque medidor de evaporación, 50 metros de cerramiento de aluminio de color verde con sus respectivas puertas y cinco metros de cable de cobre de la estación meteorológica. Valoró el botín en 6.100 euros.
Tras forzar el candado de la caseta de obra de una empresa de Maside entre los días 3 y 5 de abril (aprovechando el fin de semana y el parón de la actividad), los ladrones se apoderaron de diversas herramientas de albañilería valoradas en 500 euros, así como utensilios alquilados (dos grupos electrógenos de gasolina, un martillo picador y un taladro percutor) valorados en 3.450 euros. Asimismo, los daños en el candado de seguridad los valora en 50 euros.
La última denuncia que registró ayer la Guardia Civil con respecto a robos en empresas se produjo en Allariz. Un técnico de una empresa de telefonía denunció que en la madrugada del 5 de abril, tras cortar la alambrada de la valle del recinto de la estación de telefonía situada en el monte Santa Eulalia de Outeiro, autores desconocidos se apoderaron de una antena de teléfono de dos metros de altura y un cajetín de llaves, todo ello valorado en 3.000 euros.
El propietario de la leña presentó una denuncia por la desaparición de los troncos el pasado 5 de marzo, argumentando que acababa de regresar de un viaje a Brasil y se topó sin la madera, cuyo coste valoró en 800 euros.
Fuentes de la Guardia Civil señalaron que los agentes realizaron una inspección ocular por la zona y descubrieron que había leña de similiares característica a la robada frente a la vivienda del detenido en A Rasela. Tras las correspondientes pesquisas, comprobó que el detenido no supo explicar la procedencia de la leña.
La Guardia Civil sospecha que el detenido contó con colaboración para, supuestamente, desplazar la leña en un camión hasta su domicilio, una hipótesis que está investigando.
Sorpresa
El caso generó sorpresa en A Rasela. Vecinos consultados afirman que el propietario de la leña la guardaba frente al domicilio dende hai polo menos dous anos y señalan que lo curioso es que hace falta un vehículo de grandes dimensiones para cargar las 15 toneladas y ninguén se decatou de nada o día que desapareceu. Otros señalan que a casa queda nun extremo do pobo e de aí que sexa máis difícil levar a cabo o roubo. La leña todavía no fue recuperada por el propietario, a la espera de lo que determine la juez que le tomó declaración.
Tres empresas de la provincia sufren robos de material por 12.500 euros
Diversas empresas de la provincia están sufriendo robos de material, algo que desde la Subdelegación del Gobierno no atribuyen a ninguna banda organizada, sino más bien al hecho de que dichas empresas se encuentren aisladas de zonas habitadas o por donde pasen habitualmente los vecinos.
De hecho, en Lebozán (Beariz), un técnico de mantenimiento de la estación meteorológica de esta localidad, Celestino V.V., denunció ante la Guardia Civil que entre el 15 de diciembre de 2008 y el 15 de marzo de este año autores desconocidos sustrajeron un tanque medidor de evaporación, 50 metros de cerramiento de aluminio de color verde con sus respectivas puertas y cinco metros de cable de cobre de la estación meteorológica. Valoró el botín en 6.100 euros.
Tras forzar el candado de la caseta de obra de una empresa de Maside entre los días 3 y 5 de abril (aprovechando el fin de semana y el parón de la actividad), los ladrones se apoderaron de diversas herramientas de albañilería valoradas en 500 euros, así como utensilios alquilados (dos grupos electrógenos de gasolina, un martillo picador y un taladro percutor) valorados en 3.450 euros. Asimismo, los daños en el candado de seguridad los valora en 50 euros.
La última denuncia que registró ayer la Guardia Civil con respecto a robos en empresas se produjo en Allariz. Un técnico de una empresa de telefonía denunció que en la madrugada del 5 de abril, tras cortar la alambrada de la valle del recinto de la estación de telefonía situada en el monte Santa Eulalia de Outeiro, autores desconocidos se apoderaron de una antena de teléfono de dos metros de altura y un cajetín de llaves, todo ello valorado en 3.000 euros.
