El gasto medio en consumo por persona se situó en 10.654 euros anuales en los hogares gallegos en 2010, según la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es un 4,5% inferior al del conjunto estatal, donde alcanzó los 11.161 euros, y similar al de comunidades como Aragón (10.966) y Castilla y León (10.533), un 1,7% y un 5,6% por debajo de la media, respectivamente.
Encabeza la lista País Vasco (13.634 euros), mientras que el de Canarias (8.977) se situó un 19,6% por debajo de la media. Con todo, el gasto medio en consumo por persona cae en los hogares de Galicia un 1,32% con respecto a 2009, cuando fue de 10.797 euros y se sitúo cinco puntos debajo de la media. Por ello, la comunidad gallega reduce el diferencial en 0,5 puntos.
Los hogares gastaron en 2010 un 2,1% menos que en 2009 (año en el que la caída fue de más del doble) y desembolsaron una media de 29.782 euros que fueron a parar sobre todo a vivienda, alimentos y transporte. Por contra, el gasto medio en España por persona subió a 11.161 euros anuales, un 1,8% menos.
Con la crisis económica, los gastos que más se sacrifican siguen siendo los que se destinan a hoteles, cafés y restaurantes (bajan un 4,7%), mobiliario (4,6% menos) y ropa (4,2% menos).
EDUCACIÓN Y VIVIENDA
El desembolso que más creció fue el destinado a enseñanza, un 9,6% mayor que en 2009. El gasto en educación es el único que creció en los hogares en términos constantes desde que comenzó la crisis económica.
Si se compara con 2009, en 2010 los hogares (de una o varias personas) gastaron más en transporte (1,6 %), bebidas alcohólicas, tabaco y narcóticos (1,3%) y vivienda (0,4%). El crecimiento de la población en España y la disminución del tamaño de los hogares en los últimos años originó un crecimiento del número de estos. Este aumento, unido a la disminución del gasto total respecto de 2009, provocó que en 2010 el gasto medio por hogar bajara un 2,1% respecto al año anterior y se situara en 29.782 euros. Corregido el efecto de la inflación, la reducción del gasto medio por hogar fue del 3,6%.
Respecto a la estructura del gasto de hogares, éstos destinaron el 30% a gastos relacionados con vivienda (8.935 euros), que incluye alquileres reales, gastos corrientes de agua, electricidad, gas, comunidad, reparaciones, calefacción, así como alquiler. Estos gastos aumentaron más de cinco puntos su importancia en el presupuesto desde el 2006. Mientra que el transporte se redujo en más de dos puntos, artículos de vestir y calzado en 1,3 puntos y el mobiliario (1 punto).
En 2010 alimentos y bebidas no alcohólicas representaron un 14,4% del total (4.279 euros) y el transporte el 12,4% (3.680 euros). El gasto varía según la principal fuente de ingresos del hogar. En 2010 el más elevado se registró en aquellos con ingresos de trabajo por cuenta propia.
Sin embargo, los hogares con rentas de propiedad subieron su gasto y los que tenían ingresos de subsidios, prestaciones sociales y pensiones fueron los de menor gasto.
Los hogares gastaron en 2010 un 2,1% menos que en 2009 (año en el que la caída fue de más del doble) y desembolsaron una media de 29.782 euros que fueron a parar sobre todo a vivienda, alimentos y transporte. Por contra, el gasto medio en España por persona subió a 11.161 euros anuales, un 1,8% menos.
Con la crisis económica, los gastos que más se sacrifican siguen siendo los que se destinan a hoteles, cafés y restaurantes (bajan un 4,7%), mobiliario (4,6% menos) y ropa (4,2% menos).
EDUCACIÓN Y VIVIENDA
El desembolso que más creció fue el destinado a enseñanza, un 9,6% mayor que en 2009. El gasto en educación es el único que creció en los hogares en términos constantes desde que comenzó la crisis económica.
Si se compara con 2009, en 2010 los hogares (de una o varias personas) gastaron más en transporte (1,6 %), bebidas alcohólicas, tabaco y narcóticos (1,3%) y vivienda (0,4%). El crecimiento de la población en España y la disminución del tamaño de los hogares en los últimos años originó un crecimiento del número de estos. Este aumento, unido a la disminución del gasto total respecto de 2009, provocó que en 2010 el gasto medio por hogar bajara un 2,1% respecto al año anterior y se situara en 29.782 euros. Corregido el efecto de la inflación, la reducción del gasto medio por hogar fue del 3,6%.
Respecto a la estructura del gasto de hogares, éstos destinaron el 30% a gastos relacionados con vivienda (8.935 euros), que incluye alquileres reales, gastos corrientes de agua, electricidad, gas, comunidad, reparaciones, calefacción, así como alquiler. Estos gastos aumentaron más de cinco puntos su importancia en el presupuesto desde el 2006. Mientra que el transporte se redujo en más de dos puntos, artículos de vestir y calzado en 1,3 puntos y el mobiliario (1 punto).
En 2010 alimentos y bebidas no alcohólicas representaron un 14,4% del total (4.279 euros) y el transporte el 12,4% (3.680 euros). El gasto varía según la principal fuente de ingresos del hogar. En 2010 el más elevado se registró en aquellos con ingresos de trabajo por cuenta propia.
Sin embargo, los hogares con rentas de propiedad subieron su gasto y los que tenían ingresos de subsidios, prestaciones sociales y pensiones fueron los de menor gasto.
