El próximo jueves tomarán el tren en A Rúa y se desplazarán hasta O Barco
Un centenar de vecinos de A Rúa se habían anotado hasta ayer en el Concello para sumarse a la protesta programada para el próximo jueves. La cifra fue dada a conocer por la alcaldesa, María González Albert, que insistió en la defensa del servicio de información y venta de billetes de la estación ruesa. "É un símbolo para A Rúa", dijo, aludiendo a la estrecha vinculación del ferrocarril con la villa.
Los interesados en participar en la protesta del 9 de febrero aún están a tiempo de anotarse en la Casa Consistorial para poder regresar hasta A Rúa en los autobuses que contratará el Concello. El plazo de inscripción finaliza mañana y, para la movilización, la organización aconseja llevar chalecos reflectantes y silbatos. La convocatoria prevé tomar el tren de las 18,20 horas, si bien hay organizada una quedada en la estación para las 17,45 horas.
La protesta surge a raíz de una comunicación del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) a los representantes sindicales. En ella, les informa de que su personal dejará de vender billetes de tren en las estaciones de Carballiño, A Rúa-Petín, Ribadavia, O Barco, Guillarei y Sarria. Ayer, lo recordó el Concello en una declaración institucional, que firman los tres partidos políticos presentes en la Corporación municipal: BNG, PSdeG-PSOE y PP.
"Se trata dunha decisión unilaterial da dirección de Adif, que supón a desaparición dun servizo fundamental nestas estacións, que o ano pasado acolleron un total de 159.928 pasaxeiros", dice el escrito del Concello.
El pleno del comité provincial de Adif en Ourense también mostró su rechazo por los "recortes de servicio" y el cese de la venta de billetes en las citadas estaciones. En un comunicado defendió un ferrocarril "público, social, seguro y de calidad".