Cartas al director

¡Que suerte no ser placero!

Soy un chico de 15 años y quiero preguntar, por qué el Concello ha decidido reubicar, "provisionalmente", la Plaza de Abastos, mientras dure su rehabilitación, en un lugar tan emblemático y concurrido como es la Alameda. Además, resulta desconcertante el desorbitado presupuesto, de más de medio millón de euros, invertido en una estructura que, en principio, será pronto eliminada.

Por si no fuera suficiente, cabe destacar que, a pesar de llevar meses terminada, todavía no se han podido desplazar los placeros, a la misma.

Esto recuerda la situación de su homónima, en A Ponte, que, aunque su rehabilitación concluyó hace tres años, hasta la fecha sigue vacía. Esperemos que el arreglo entre el Concello y los placeros llegue a buen puerto, y pronto vuelvan a funcionar ambas.