Cartas al director

Odilo Nóvoa; Papá, abuelo, y que grande fuiste

Papá, la última noche que pasé contigo escribí esta carta y dicen que de bien nacidos es ser agradecidos.

Querido papá, te marchaste en silencio y sin hacer ruido, sin quejas ni lamentos, como fuiste siempre en tu vida, trabajador, honrado, noble y valiente. Nos dejas un recuerdo imborrable con tu ejemplo siempre de lucha y constancia, tus consejos y sabiduría de saber buscarte la vida, desde que te escapaste de casa de tus padres, en 1943, con solo 15 años, desde tu Siabal de Paderne (Ourense), lugar de nacimiento, hasta llegar a Santander, para comenzar tu emprendedora vida de trabajo, que luego te trajo a Xinzo de Limia, para recorrer con tu maleta de vendedor ambulante, todos los pueblos de La Limia, hasta la Raia de Portugal, comiendo y durmiento donde te coincidía (años de hambre y frío). Hiciste la mili en África (Melilla), luego conociste en Xinzo y te casaste con nuestra también querida (D.E.P) Mamá Maruja, para, a principios de 1950, abrir tu primera tienda en Xinzo. Fuisteis creciendo con el paso de los años, vendiendo artículos muy variados (relojes, radios, ropa, calzado, paraguas, bisutería, joyería, etc… De todo lo que había en esa época y las primeras televisiones, a comienzo de 1960, donde ya fundasteis “LAS 3 BBB” y así continuasteis toda vuestra vida con trabajo y sacrificio… Y criándonos y educándonos a nosotros.

Papá, nunca te olvidaremos, por todas tus virtudes y los valores humanos que nos enseñaste, por tu seriedad y saber estar con todo el mundo, fuese quien fuese, en su ámbito social. Eras natural y auténtico, exigente, pero nunca malgastaste el dinero, y tus vicios eran únicamente fumar puros y jugar unas partidas de tute, donde eras un maestro de las cartas. 
Nos dejaste y te recordaremos como fuiste, un hombre de arriba abajo y una buena persona, muy querida y respetada. Ahora Mamá te estará esperando, allá en el otro mundo, para volver a empezar una nueva vida.
Papá, en tu nombre, quiero dar las gracias a todos (médicos, enfermeras, personal sanitario, etc., por sus atenciones contigo y en especial a tus cuidadoras, (Mary, Ana, Manola y Angelita). Un beso con cariño de tus nueras, (Conchy, Chon y Elena) y de tus nietos (Raquel, Iria, Nerea, Iago, María, Pablo) y de Enrique, nieto político, desde el pasado sábado día 16, que se casó con Raquel.

Hasta siempre papá..., siempre estarás con nosotros.

Tus hijos Toño, Odilo y Carlos Nóvoa Rivero.