Opinión

Arrogante

Hay muchas maneras de alejarse de la realidad de todos los días, de mantenerse por encima de las nuevas generaciones. Es fácil hablar de grandes principios, de ser crítico y desdeñoso. Es a veces gratificante predicar sobre la benevolencia, la rectitud, la lealtad o la humildad. Es relativamente sencillo dar consejos sobre moral y normas de comportamiento; es sin embargo muy difícil desapegarse de lo material, desprenderse de la riqueza y perdonar a quien nos ha hecho daño. Es privilegio de unos pocos alcanzar una virtuosa humildad; es muy difícil adquirir la sabiduría y so- portar majaderías.

El que busca la verdad nunca la encontrará si no es capaz de desprenderse de su ego; todo es relativo, todo es interpretable. El rio fluye en invierno, se seca en el estío y vuelve a brotar en otoño; cuando el ser humano cambia su curso sucumbe en el torrente tormentoso de embravecidas aguas. El predicador busca prosélitos y adoctrina el pensamiento; esclavos frágiles y temerosos, frutos sin madurar y víctimas culpables.

Reyes, banqueros, potentados, famosos, refugiados, hambrientos, menesterosos, feos o hermosos; muertos al fin, iguales en la eternidad del silencio. Siempre acabarán en el olvido y necios o sabios son y serán sencillamente polvo estelar.

Instrucción, cultura, conocimiento y consciencia; almas huérfanas del sosiego de la aceptación sino de vida y alivio de ansiedades. La angustia de la muerte se transforma en la serenidad que da el no saber; liberación del yo en integra- ción con el Ser.

Días de reflexión, huida de lo fútil, el espectáculo está servido, la incógnita despejada, el resultado ¡qué más da! Nadie piensa que un perro sea algo especial solo porque pueda ladrar, ni que un hombre sea sabio porque pueda hablar, piensa, crea ideas, ¡libérate!, no bebas la pócima del miedo, huye de la mentira, sé tú.

¿Qué sucede cuando el inconsciente social pasa del deber al poder?, revolución, caos, anarquía y eclosión de un nuevo orden. Un ciclo termina y otro empieza; y el consciente reordena la nueva opresión. Está escrito, ha sucedido, sucederá hasta la eternidad. La esencia es inmutable, nada cambia, sólo el pensamiento puede alcanzar altas cotas de libertad. No te preocupes, no te irrites, ama y disfruta del instante que te ha tocado vivir; es un consejo, lo demás sería arrogancia.

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