Ylas aguas del Nilo se convirtieron en sangre…” (Ex 7,20). Y el Mediterráneo se cubrió de cadáveres (año 2017).
“… y surgió tal cantidad de ranas que cubrieron el país de Egipto…” (Ex 8,2). Y los corruptos se multiplicaron por todos los países de la tierra (siglo XXI).
“… nubes de mosquitos se precipitaron sobre hombres y animales…”(Ex 8,13). Una nube de aviones americanos bombardean las ciudades iraquíes, causando conmoción y espanto (año 2003).
“… nubes de tábanos invadieron la casa del faraón y de sus cortesanos…” (Ex 8,20). Las ratas invaden las alcantarillas de las grandes ciudades (siglo XXI).
“… Todo el ganado de los egipcios murió…”( Ex 9, 6). Encefalopatía espongiforme bovina (Reino Unido 1986).
“… Tomaron cenizas de horno… y Moisés las esparció… produciendo úlceras y tumores…” (Ex 9,10). Tormenta de arena impulsa la contaminación de Beijing a niveles nunca vistos.
“… El granizo machacó en Egipto todo lo que había en el campo…” (Ex 9, 25). Una fuerte granizada mató a 92 personas en Gopalgnaj, Bangladesh (14 de abril de 1986).
“… La langosta cubrió toda la tierra… devoró todas las plantas de la tierra y los frutos de los árboles… (Ex 10, 15). El cultivo del aceite de palma causa principal de la destrucción de bosques sobre todo en Indonesia (Greenpeace).
“… se produjo una densa niebla… no se veían unos a otros… (Ex 10,22,23). La contaminación atmosférica en Chile causa más de 4.000 muertes prematuras (7 de Julio de 2014).
“A media noche hizo morir a todos los primogénitos… (Ex 12, 29). Síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS); fiebre de Lassa y virus Nipah (NIV) (Nuevas enfermedades del siglo XXI).
El Faraón dejó marchar al pueblo de Israel aunque, arrepentido, salió en su persecución con el fin de satisfacer su sed de venganza. En el siglo XXI las plagas siguen azotando a la especie humana que, en su locura, sigue provocando la ira de la Madre Tierra. Las estaciones rompen con su ciclo establecido; los desiertos avanzan sin que nada, ni nadie, lo pueda impedir. Los océanos se convierten en estercoleros incontrolados. El deshielo libera al letal metano. La humanidad sigue su irrefrenable proceso de robotización. El hambre, la enfermedad y la violencia colonizan extensos territorios. La envidia, la ambición, el odio, el miedo y la desesperación siguen su camino hacia el control total de las mentes. La estupidez humana se impone sobre la cordura y entroniza a la Bestia en un absurdo proceso de autodestrucción.
Según las escrituras solo se salvarán del Apocalipsis 144.000 elegidos (12x12x1.000); en la perversa planificación de los poderes oscuros se prevén quinientos millones de privilegiados supervivientes.
Solo los Tzadik podrán salvar al Mundo, deteniendo las plagas devastadoras. Quizás seas tú un Tzadikin Nistarim y no lo sepas; Leonardo DiCaprio cree serlo.
