Opinión

Latigazos en el alma

Alguna vez escribí sobre mi sobrina favorita, Maria Eugenia Noguerol. Acaba de llegar de vacaciones. Pasó un año como ' lectora de español' en la embajada en Adís Abeba. Ha regresado con otra mirada, como si hubiese un cambio en su alma. Como si se le hubiesen abierto las puertas de la percepción de las que habló Aldoux Huxley. 

Me cuenta.” Es como si hubiese vivido una experiencia bíblica, como en las viejas películas, por ejemplo Los Diez Mandamientos. Fíjate, tomaba muchas veces el autobús, allí iban corderosy gallinas que te colocaban encima. ¿Recuerdas aquellos viajes en ' mixtos' de ferias, que compartian pasajeros y animales?. Ay, en las ventanas de los autobuses de la capital se mezclan fotografías de Cristo, la Virgen y Cristiano Ronaldo.

Solo hay agua y luz eléctrica en las calles del centro. Asistí a procesiones de un millón de personas y tres días de rezo. Por supuesto, la mujer no cuenta. Todavía me hieren las visitas que hice a lejanos poblados: la tradición consiente que el hombre dé latigazos a sus mujeres; ellas los aceptan sumisas y compiten entre si orgullosas de sus cicatrices. Todavía siento el silbido de los látigos sobre sus espaldas

Lo más terrible para una mujer es tener un hijo de soltera. De inmediato la expulsan de su casa. Creeme. Adís Abeba es una ciudad llena de mujeres abandonadas que mendigan por las calles”. 

Estoy en la Plaza del Hierro en una terraza con mi sobrina. Ella mira alrededor:” Veo mucho' postureo ' y me sorprendo. Sabes, allí he aprendido a no ser una mujer consumista. Viví con tres ' vaqueros' y algunas camisetas. Observo a toda esta gente, no saben la suerte de vivir en un país como el nuestro. Mira, cuando daba mis clases en la universidad y tenía que ir al servicio, el water era un agujero negro, al que tenias que echar un cubo de agua. En esos paises, la higiene no es una prioridad, tienen otras. Toda rebeldía está anestesiada.

Cuando viajé a aldeas remotas me sorprendió la entereza de sus mujeres .Caminan muchos kilómetros a la búsqueda de leña y agua. El aldeano rico es aquel que posee un burro.

Cierto, la férrea Iglesia Ortodoxa y los militares controlan hasta el alma de aquel país que llevaré para siempre en mi corazón. Aprendí muchas palabras de 'amarico'. Hay una expresión clave, que es un reflejo de la conformista filosofía etíope: 'Chiquelen'. Quiere decir, no te preocupes,no te arrepientas, mañana amanecerás feliz.

(Eugenia ha conseguido cambiar de embajada. En breve se irá a Kuala Lampur como lectora de español. Bromea “ Tio, te voy a sobrepasar, tu que presumes de haber estado en tres continentes...”

Se despide:” Te he traido este amuleto bendecido por tres santones, hecho especialmente para ti, tuve que enseñarles tu foto. Al verla, no creas que pusieron muy buena cara”).



Addistancia : blog de una lectora de español en Adís Abeba

Te puede interesar