Viralidad? Eso es una invención. La palabra viralidad no existe ni aparece en el diccionario de la RAE. Y sin embargo, cualquiera puede decirnos lo que es un contenido viral: algo que se reproduce, se multiplica y se expande. Como un virus.
Y no les falta razón. El contenido viral es así. Y si no se lo creen, miren la semanita que hemos pasado con los Pokemons. Todos inoculados como si de la viruela se tratara. Es que no se habla de otra cosa oiga. Y es que cuando nos llega algún contenido de este denominado viral y nos inocula con humor, con gatitos o con algún golpe merecido de un imprudente que pretendía grabar su estúpida hazaña, todos quedamos encantados. A mí me lo recomendó un amigo, a mí me lo ha enviado Pepe o me lo ha enviado Juan. ¿Pero de donde lo sacan Pepe y Juan? ¿De dónde salen las cosas virales? Los directores de marketing de las empresas quieren vídeos virales, campañas de marketing virales, acciones virales… como si se pudiera. Y fíjense que me hago esta pregunta después de vivir la “semana Pokemon” en primera persona y como un paciente más. Tengo cincuenta años. Soy calvo, bajito y tripón por culpa de las coca colas. No creo ni por un instante que los señores de Nintendo pensaran en alguien como yo cuando desarrollaron Pokemon Go y sin embargo estoy loco con el juego.
No pienso abusar, ni perseguir Pokemons por la calle como un tonto para que me atropelle un coche como al otro, ni entraré en ninguna comisaría persiguiendo a ningún muñeco que se me ponga por delante de la pantalla, pero he de reconocer que ya he mirado en mi casa a ver si los hay, en los bares de los amigos y en mi trabajo (aquí hay dos, pero los cabritos se esconden) Y me pregunto: ¿me ha inoculado el juego? ¿Porqué me he tenido que enterar yo de que esto existe señor? ¿Quién ha tenido la culpa? Le pregunto a Google. Aparecen trescientos treinta millones de entradas relacionadas con los Pokemon Go. Van a ser muchas. Reduzco la búsqueda a noticias y ya solo aparecen seis millones seiscientas mil. Joer. Venga, empiezo. Voy mirando a ver dónde está el origen de mis males, a ver porqué me gusta a mí y es tan popular el jodio juego. La noticia de última hora: Pokemon Go dispara las acciones de McDonald´s. Madre mía, qué nivel. Me resulta curioso que todas las noticias que aparecen son recogidas de medios escritos nacionales. Sigo la búsqueda. Página dos, lo mismo. Y la tres, y la cuatro…. Y no me ha hecho falta ver más que las diez primeras páginas para saber quién es el responsable de que yo ahora pierda mi tiempo, mi preciado tiempo, buscando monigotes: La prensa. Estoy convencido de que la prensa es quien hace a los contenidos virales. ¿Internet? Una leche. En Internet aparece lo que dice la prensa y punto. Bueno, me voy que se me escapa el jodio Pokemon.
