Opinión

Un ourensano en Cambridge

Nuestros jóvenes cerebros son apreciados, valorados y bien pagados en los países en los que la investigación es uno de los temas prioritarios. En esos países se les facilita todo aquello que requiere su trabajo y ellos dan lo mejor de sí mismos. Este es el caso del doctor Carlos González Fernández, astrofísico ourensano que cuenta en su haber con una importante experiencia adquirida en los principales observatorios astronómicos, lo que sitúa su curriculum en un altísimo nivel. Debido a ello, hace tiempo que fue contratado por una de las universidades más importantes del mundo: Cambridge. 

Allí desarrolla sus conocimientos, procesa datos, elabora informes  y expone sus proyectos. Allí continúa auscultado los recovecos de un cielo que se encierra en sí mismo, permitiendo de vez en vez que se desvele alguno de los millones de secretos que encierra. Tema apasionante, sobre el que los científicos del mundo cada día nos sorprenden con descubrimientos y teorías varias; caminos infinitos y respuestas que van seguidas de intrincadas y difíciles preguntas por resolver. 

Según el astrónomo Martín Rees, pionero en el estudio del origen del Universo, existen millones de planetas en los que posiblemente haya podido surgir la vida. Sobre este tema, otros expertos aseguran que esos pobladores, si es que los hay, no tienen porque ser necesariamente semejantes a nosotros, acostumbrados a figurarnos el universo a la medida humana. Aquí la imaginación se anima. 

Cada día nacen y mueren infinidad de estrellas, se crean nuevas galaxias, se hacen cálculos para descubrir nuevos planetas, y se instalan gigantescas antenas para recoger indicios sonoros de que hay alguien más ahí fuera. ¿Fuera? ¿Es correcta esta apreciación? ¿No estamos dentro de un todo participando de un devenir que no alcanzamos a comprender? Sólo los astrofísicos, los astrónomos, pueden explicar estas cosas, revelar algo a través de lo mucho que estudian sobre ese enigma en el que vivimos inmersos. 

Por eso es tan importante el trabajo de investigadores como Carlos González Fernández, sobre todo ahora, que el interés en la Tierra, es explorar y encontrar agua en los astros que nos rodean.

Te puede interesar