El Polígono gana sufriendo

El Polígono se quedó con los tres puntos al superar por 2-1 al Sporting Carballiño, pero dejando algunos interrogantes que le pudieron costar dejarse puntos ante un rival que lo dio todo hasta el final.

Los locales cayeron en la trampa del fuera de juego de su oponente, que pudo abrir el marcador. Robin probó desde el pico del área y casi sorprende a Rodri, que alcanzó a desviar con la mano y la ayuda de la cruceta. Si embargo, respondió Juan con un saque de esquina que se estrelló en el palo. El propio ariete industrial probó fortuna desde lejos, pero el balón se marchó alto.

Las acciones a balón parado generaron mayor peligro, como una falta de Canexón que exigió a Rodri que volvió a salvar a los suyos. A partir de ahí el partido cayó en un pozo en el que los errores defensivos marcaron tendencia. Precisamente el Polígono se encontró con un gol producto de un obsequio de Riveiro, que al intentar ceder el balón a su portero terminó mandando el esférico al fondo de la red. Era el 1-0.

En el inicio de la segunda parte, Raúl López le robó la cartera a Abel Fernández y dentro del área sacó un disparo ajustado al palo izquierdo estableciendo el 2-0. Era demasiado premio por los méritos contraídos, de todas maneras el conjunto carballiñés pudo marcar en una jugada de carambola en la que el despeje de Rodri dio en un rival y el balón se estrelló en el palo.

Más tarde pudo llegar la sentencia, tras un nuevo fallo del exjugador del Peroxa Abel Fernández, que le quedó servido a Juan, pero con la sola oposición de Gorka terminó rematando al cuerpo del cancerbero.

Está claro que cuando uno perdona, termina pagándolo en su propia área. Siño derriba a Ibai y el penalti lo transforma Canexón ajustado al palo derecho, superando la estirada de Rodri. Con este recorte de distancias en el marcador, el Sporting Carballiño fue ganando terreno, empujando a su rival hasta arrinconarlo. Estuvo a punto de empatar Damián, pero su tiro salió desviado por muy poco. Con los cambios fue ganando más presencia en el área donde los industriales no daban salido en busca de alguna contra, pero los intentos no llevaron peligro para Gorka.

Israel, uno de los cambios introducidos por el técnico sportinguista tuvo la oportunidad con un buen cabezazo de superar a un Rodri que terminó mandando al córner.

En pleno descuento llegaron dos nuevas oportunidades para alcanzar el empate. Una falta lateral que cabeceó Víctor Gallego y que controló el meta local y Canexón que casi anota tras un fallo defensivo. Los carballiñeses no tuvieron premio.