O Barco se mojó con La Vuelta

O Barco de Valdeorras vivió este miércoles, 10 de septiembre, una jornada para el recuerdo. Por primera vez en los 90 años de historia de La Vuelta a España, la localidad acogió la salida de una etapa, la número 17, un acontecimiento que fue recibido con entusiasmo por vecinos y visitantes, pese a que la lluvia marcó el inicio del día.

Desde primera hora, la Avenida Marcelino Suárez se convirtió en el epicentro de la cita deportiva. A pesar del tiempo desapacible, decenas de aficionados se acercaron al lugar para vivir en directo el ambiente de la caravana y el paso de los ciclistas. “Es una pena, no llovió otros días y toca justo hoy”, lamentaba un vecino, mientras aguardaba animado la llegada de algún obsequio por parte de la caravana publicitaria.

Delante de la salida está el bar Dulce y Salado, allí sus gerentes José Luis y Susana recibían a miembros de la organización destacando que a primera hora era una jornada normal pero que esperaban “mucho más movimiento del habitual” como así terminó ocurriendo. Además, a unos metros de allí, en el Punto de Encuentro, los invitados a esta cita especial pudieron refugiarse de la lluvia, tomar un tentempié y disfrutar de la compañía, entre otros, de Joaquim “Purito” Rodríguez, ex-ciclista y de los pocos deportistas en haberse subido al podio de las tres grandes: Vuelta, Tour y Giro de Italia.

Fotos, autógrafos y actos oficiales

La jornada arrancó oficialmente con los actos institucionales, en los que participaron el subdelegado del Gobierno en la provincia, Eladio Santos; el presidente de la Deputación de Ourense, Luis Menor; la delegada especial de la Deputación, María del Carmen González; y el alcalde de O Barco, Aurentino Alonso, entre otras autoridades. La Guardia Civil y la Guardia Civil de Tráfico realizaron una formación ante el subdelegado y el presidente del ente provincial antes de partir a sus destinos dentro de los 143 kilómetros de los que constó la etapa.

El control de firmas se convirtió en otro de los momentos destacados. Más de un centenar de aficionados, muchos de ellos niños, se congregaron para ver de cerca a los corredores. A pesar de ser jornada lectiva en los centros escolares, muchos padres hicieron una excepción y permitieron que sus hijos faltaran a clase. En el CEIP Condesa de Fenosa aprovecharon la ocasión para hacer una salida didáctica al evento. Los pequeños vivieron una experiencia única cuando el líder de la clasificación general, el danés Jonas Vingegaard, se detuvo para saludarlos. La expectación también fue grande entre los seguidores portugueses que quisieron mostrar su apoyo a Joao Almeida, segundo en la tabla, y unos aficionados llegados desde Uruguay que animan estos días a Thomas Silva y Éric Fagúndez.

Protesta pro-Palestina

La mañana también estuvo marcada además por una protesta en apoyo a Palestina, que reunió a cerca de un centenar de personas, entre ellas responsables políticos de la comarca como María González Albert, alcaldesa de A Rúa, y Enrique Álvarez Barreiro, regidor de Vilamartín. La concentración transcurrió sin incidentes que afectasen al desarrollo de la prueba deportiva.

Con la salida oficial, con el corte de cinta protocolario por parte de las autoridades locales, provinciales y autonómicas, la lluvia dio una tregua y hasta se dejó ver el sol, lo que permitió a vecinos y visitantes despedir con ilusión a la serpiente multicolor.

El pelotón recorrió calles del casco urbano antes de poner rumbo hacia El Bierzo, acompañado por los ánimos del público y pancartas de apoyo, como la desplegada desde el Colegio Divina Pastora.

La Vuelta se marchó de Valdeorras, pero dejó grabado un día histórico en la memoria de los barquenses, que ya guardan en su recuerdo el poder vivir desde cerca un evento tan importante como La Vuelta a España a apenas dos días del inicio de otro evento más rutinario, pero no menos importante, las Festas do Cristo.