Un empate logró el Arenteiro en Fuenlabrada que les supo a poco luego de la victoria de Unionistas con la que les supera en tres puntos en la lucha por la plaza que da derecho a jugar la Copa del Rey. Todo, a falta de dos jornadas para acabar la liga.
El defensa verde Pol Bueso, curtido en mil batallas, no arroja la toalla: “Es verdad que en Madrid no hicimos un buen partido, pero quedan seis puntos en juego y no vamos a aflojar. Intentaremos sumar los tres ante el filial del Celta y a ver qué pasa en Salamanca”.
El sábado, desde las siete ante el Celta Fortuna, punto y final a la temporada como locales en Espiñedo. “Nunca quieres que se acabe, pero tenemos que pensar que lo importante es lo que hemos vivido y disfrutado esta temporada. Tratar de despedirnos de nuestra gente con victoria, competir lo mejor posible y disfrutarlo”.
Porque una cosa sí que tiene clara Pol Bueso en los tres años que lleva en el Arenteiro. “Les estaré eternamente agradecido. Desde que llegué solo tengo recuerdos imborrables. Me han hecho volver a sentirme un jugador importante, me han tratado y cuidado de maravilla y, aunque es verdad que cuando ves que te queda poco, le vas dando más valor. También es de justicia reconocer que cosechar tantos éxitos como llevamos es muy difícil”.
Lo dice un jugador que tiene claro que “este año aún no cuelgo las botas, eso está claro. Me siento bien y todavía me veo para competir, pero también tengo claro que cuando no me vea seré el primero en levantar la mano y decir hasta aquí hemos llegado. Por ahora la cabeza aún me dice que estoy para continuar compitiendo y jugando. Al terminar la temporada nos sentaremos y a ver qué pasa”.
El defensa tiene claro que “la cabeza es fundamental y, si está donde corresponde, se lleva todo mejor. En este mundo se pierde mucho más que se gana, por eso también es clave saber que cuando las cosas no salen bien tienes que convivir con ello y llevarlo de la mejor manera”. Y termina señalando que “a día de hoy puedo decir que estoy en paz con el fútbol”.
