Vecinos de Seoane representan en la ‘Festa do millo’ el proceso artesanal en la preparación del cereal

Los hombres cambian las cartas por el maíz

Los más pequeños están atentos a la ‘escasulla’ de la planta. (Foto: José Paz)
Los vecinos del pueblo de Seoane, en el Concello de Allariz, llevaron a cabo la representación de las antiguas tareas del campo con la celebración de la tercera edición de la ‘Festa do Millo. Bajo un sol impropio de estas fechas, niños y mayores compartieron una jornada festiva donde la anécdota de la puso el propio maíz, que no se pudo recoger en su totalidad porque todavía estaba ‘algo verde’. El punto y final a la fiesta corrió a cargo de los vecinos de Queiroás, con la representación de ‘A tía lambida’.
La música de los gaiteiros marcó el inicio de la tercera edición de la ‘Festa do Millo’ que ayer celebraron los vecinos de Seoane, en el Concello de Allariz. Al son de las gaitas comenzaron a salir de sus casas grandes y pequeños para participar en los actos que pretende mantener viva en la memoria de los vecinos el proceso del cultivo de este cereal, tan importante en la zona. ‘Vou coller o buzo’, exclamaban los hombres que, tras la partida de las cuatro, cambiaron las cartas por la cestas, en la representación de la recogida del maíz. ‘Primeiro imos o eido, alí córtase a planta de millo polo pé e amoréase para comezar coa escasulla’, explicaba Daniel Rodríguez, uno de los primeros en llegar a la ‘eira’. Soportando unas temperaturas impropias para este tiempo, sobre las cinco de la tarde los vecinos comenzaron su peregrinación hasta la finca plantada y cuidada por los habitantes del lugar. ‘A primeira tarea vai ser simbólica, porque aínda está moi verde’, coincidían los más mayores del pueblo. Y no les faltaba razón.

La planta está verde

La falta de maduración de la planta provocó que fueran los más pequeños del pueblo, Anxo, Miguel, Ana, Adriana y Javier, los que llevaron a cabo la representación de los trabajos de cortar la planta y eliminar la hoja de la mazorca. ‘Eu quero outra’, reclamaban a sus progenitores. ‘O importante é que se vexa como se facían antes estes traballos. Visto que iste aínda non sirve para cortar, completaremos o proceso co millo do ano pasado’, confesaba Teresa Devesa, responsable de Cultura del Concello.

A pesar de este ligero contratiempo, los vecinos de Seoane continuaron el proceso. ‘Primei ro escóllense as mellores para gardalas no canastro e as pequenas e malformadas para o consumo inmediato’, explicaban María y Rosa González a la sombra de uno de los hórreos, a la vez que coincidían con su vecina, Josefa Pacheco, en la impor tancia ‘de manter as tradicións, sobre todo para que as coñezan os rapaces’.

Durante toda la jornada festiva, los vecinos estuvieron acompañados de los acordes de la música tradicional; mientras, los más pequeños disfrutaron con la participación en diversos los juegos populares. El punto y final a esta tercera edición de la ‘Festa do Millo’ lo pusieron los vecinos de Queiroás, que representaron la obra de teatro ‘A tía lambida’ de Eduardo Blanco Amor.

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