El salón de plenos de Allariz fue tomado ayer por un grupo de padres y madres de alumnos, preocupados y enfadados por el nuevo recorte en materia de Educación llevado a cabo por la Xunta de Galicia: el copago de los comedores escolares.
Los convocantes explicaron pormenorizadamente el borrador del nuevo decreto que regulará los comedores escolares y de forma muy didáctica la repercusión que esta decisión tendrá para los bolsillos. 'É escandaloso que haxa pais que teñan que pagar 4,5 euros polo comedor', cuestionó el alcalde, Francisco García que, acompañado por los compañeros de la Corporación, estuvo presente en la asamblea. García Suárez puso en evidencia el 'grave problema que acarreará para os veciños do rural' y negó que esta decisión esté relacionadas con una medida de ahorro económico 'claramente están premiando un modelo ideolóxico'.
En el transcurso de la reunión, se acordó llevar a cabo diferentes medidas, que comenzarán con una recogida de firmas, 'co obxecto de plantar clara a esta política de recortes do publico en favor do ensino privado', señalaba el regidor, que animó a los progenitores a acudir al pleno de esta tarde donde se debatirá una moción del BNG el que se insta a la Xunta a no establecer un nuevo copago en los comedores escolares.
En el transcurso de la reunión, se acordó llevar a cabo diferentes medidas, que comenzarán con una recogida de firmas, 'co obxecto de plantar clara a esta política de recortes do publico en favor do ensino privado', señalaba el regidor, que animó a los progenitores a acudir al pleno de esta tarde donde se debatirá una moción del BNG el que se insta a la Xunta a no establecer un nuevo copago en los comedores escolares.
