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Gritos y acusaciones en el pleno del agua celebrado en Ramirás

photo_camera Todos los grupos apoyaron por unanimidad las propuestas presentadas por los socialistas (de espaldas).

La Corporación decidió no cobrar los recibos mientras continúe la contaminación por arsénico

Cruces de acusaciones y algún que otro grito entre PP y PSdeG-PSOE crisparon ayer el ambiente en el pleno extraordinario celebrado en el Concello de Ramirás. La contaminación por arsénico en el servicio de agua que abastece a las parroquias Freás de Eiras, Mosteiro, Paizás y Vilameá, detectada el pasado día 17 de julio y que aún hoy mantiene la prohibición para uso alimentario de dicha agua, motivó la sesión extraordinaria instancias del grupo municipal socialista. "Temos dereito a solicitar tres plenos ao ano", recordaba Isabel Gil, portavoz del PSdeG-PSOE (que tiene cuatro ediles en la Corporación, los mismos que el PP y uno el BNG), para acto seguido atacar al alcalde, Juan Carlos Rodríguez, por la tardanza en convocarlo (se solicitó el 24 de julio).

Pese a la más que evidente enemistad entre los portavoces, el PSdeG-PSOE logró el respaldo del PP y BNG para aprobar la supresión inmediata de la emisión de facturas por el consumo de agua a los afectados hasta que no se solvente el problema. La petición de los socialistas exigía dicha decisión a la Diputación, si bien el regidor aclaró que "a autoridade témola nós no pleno, se estamos de acordo en que non se emitan, aprobámolo". 

Aunque no estaban de acuerdo con algunos puntos (o todos) de la exposición de motivos socialista, con su voto, tanto PP como BNG respaldaron la adopción de medidas urgentes que garanticen el suministro (actualmente se entrega agua embotellada a los afectados) y que el Concello lleve a cabo el análisis y revisión de los sistemas de captación, depuración y canalización del agua de la traída en Ramirás.

CONTAMINADA EN 2016

Parco en sus intervenciones, el portavoz del BNG, Marcos Meléndez, mostró su apoyo a la propuesta, si bien señaló que "non fai falta berrar para posicionarse". Al tiempo que mostró su extrañeza cuando Isabel Gil anunció que no era la primera vez que salía arsénico en los análisis. "De outubro a decembro do 2016 deu arsénico e non nos decatamos. Ou se despistou ou fixo a vista gorda", dijo al acabar la sesión.

Sobre este punto, Rodríguez aclaró también a posteriori que "é verdade que deu, pero nos tanques e na ETAP, non na captación. Foi entón cando se limpou todo e empezouse a facer o seguimento. E ata o 17 de xullo non volveu dar".

Balsa de lodo y arsénico

No fue posible, por la negativa del regidor, a incluir en la aprobación medidas concretas no recogidas en el texto, pero si señaladas en la sesión por la portavoz socialista como el arreglo del depósito vecinal de O Picouto o la limpieza del embalse del Tuño. "Aquela balsa é unha basura. Unha porquería de lodo e arsénico que hai que limpalo. E si hai que parar a actividade da hidroeléctrica, párase porque levan moitos anos aproveitando sen pagarnos un duro", dijo la socialista, que no cree que la instalación del filtro sea una solución. 

Limpiar el embalse del Tuño, ubicado en el municipio de Celanova, "non soluciona o problema, porque o arsénico está por encima. No mesmo río", señaló Rodríguez. El regidor aprovechó su turno para relatar los pasos dados por su grupo de gobierno desde el pasado 17 de julio "seguindo sempre o protocolo que marca Sanidade". En este punto, reiteró que están trabajando para dotar a la planta de Ramirás de un filtro que limpie el arsénico del agua y, paralelamente, buscando río arriba una zona libre de este elemento para realizar una nueva captación. 

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