El español Fernando Alonso superó no exento de complicaciones la jornada de entrenamientos para el GP de Italia, en el que a pesar de varios contratiempos marcó el tercer tiempo, por detrás de los McLaren.
El ovetense, que rodó mucho menos de lo esperado a causa de un problema de motor en la primera sesión y sobre todo como consecuencia de complicaciones en la caja de cambios de su monoplaza en la segunda, acabó no obstante la jornada con el tercer mejor tiempo, por detrás pero a muy poca distancia de los dos McLaren.
El inglés Lewis Hamilton fue el más rápido del día, al cubrir en su mejor giro de la sesión vespertina los 5.793 metros de la pista lombarda a una media de 244,5 kilómetros a la hora.
Hamilton firmó un registro de un minuto, 25 segundos y 290 milésimas, 38 menos que su compatriota y compañero en McLaren Jenson Button.
Alonso, que había sido cuarto en la primera sesión, en la que el alemán Michael Schumacher (Mercedes), marcó el mejor crono (1:25.422), acabó sin probar todo lo que quiso durante la segunda, en la que apenas dio 17 vueltas.
Muy pocas en comparación con las que dio su compañero brasileño Felipe Massa (43), que logró el cuarto mejor tiempo de ese acto (1:25.430). Pero suficientes para verificar, como ya había adelantado el jueves, que sobre el papel el enemigo a batir es McLaren. Y que la distancia no es abrumadora.
Alonso, que en la mejor de sus primeras 22 vueltas había marcado un tiempo de un minuto, 25 segundos y ocho décimas justas, lo mejoró casi en cinco en la segunda sesión, en la que sus 1:25.348 le dejaron a sólo 58 milésimas del crono de Hamilton.
El otro español, Pedro de la Rosa, capitán del HRT, que celebra su centenario en la Fórmula 1 en Monza, fue vigésimo tercero en una jornada en la que su escudería aportó la nota exótica al hacer debutar en Fórmula 1 al primer chino de la historia, Ma Qing Hua, su segundo probador, que participó en la primera sesión y que según el director del equipo, Luis Pérez Sala, rindió por encima de lo esperado.
MASSA NO DESENTONÓ
Alonso, que no tendrá que reemplazar la caja de cambios de su monoplaza, comprobó el poderío de McLaren pero explicó que los datos recopilados por Massa, que también rodó rápido, servirán para perfilar lo necesario para la cronometrada.
El piloto asturiano sacó lectura positiva a una jornada enrevesada. Está pegado a los McLaren, sobre los que tiene un importante colchón de puntos, así que si no puede ganar como mal menor admitiría una victoria de alguno de los pilotos de la escudería de Woking.
Porque sus inmediatos seguidores en el Mundial, los pilotos de Red Bull, no brillaron en Italia. El alemán Sebastian Vettel (segundo en la clasificación general del campeonato del mundo a 24 puntos de Alonso) y Mark Webber, tercero a 32, fueron decimotercero y undécimo. Fernando sabe que la calificación será fundamental y aceptaría un podio, siempre y cuando Vettel entre por detrás de él.
Pero en su la mente del dos veces campeón del mundo de Fórmula 1 está otra victoria en el trazado italiano de Monza, donde los triunfos siempre son especiales. En territorio Ferrari, escudería de la que el asturiano es el buque insignia. Donde podría ganar por tercera vez. E igualar el cuarto mejor registro de todos los tiempos (31 triunfos), en poder del inglés Nigel Mansell.
MONZA, 14,00. ANTENA3.
El inglés Lewis Hamilton fue el más rápido del día, al cubrir en su mejor giro de la sesión vespertina los 5.793 metros de la pista lombarda a una media de 244,5 kilómetros a la hora.
Hamilton firmó un registro de un minuto, 25 segundos y 290 milésimas, 38 menos que su compatriota y compañero en McLaren Jenson Button.
Alonso, que había sido cuarto en la primera sesión, en la que el alemán Michael Schumacher (Mercedes), marcó el mejor crono (1:25.422), acabó sin probar todo lo que quiso durante la segunda, en la que apenas dio 17 vueltas.
Muy pocas en comparación con las que dio su compañero brasileño Felipe Massa (43), que logró el cuarto mejor tiempo de ese acto (1:25.430). Pero suficientes para verificar, como ya había adelantado el jueves, que sobre el papel el enemigo a batir es McLaren. Y que la distancia no es abrumadora.
Alonso, que en la mejor de sus primeras 22 vueltas había marcado un tiempo de un minuto, 25 segundos y ocho décimas justas, lo mejoró casi en cinco en la segunda sesión, en la que sus 1:25.348 le dejaron a sólo 58 milésimas del crono de Hamilton.
El otro español, Pedro de la Rosa, capitán del HRT, que celebra su centenario en la Fórmula 1 en Monza, fue vigésimo tercero en una jornada en la que su escudería aportó la nota exótica al hacer debutar en Fórmula 1 al primer chino de la historia, Ma Qing Hua, su segundo probador, que participó en la primera sesión y que según el director del equipo, Luis Pérez Sala, rindió por encima de lo esperado.
MASSA NO DESENTONÓ
Alonso, que no tendrá que reemplazar la caja de cambios de su monoplaza, comprobó el poderío de McLaren pero explicó que los datos recopilados por Massa, que también rodó rápido, servirán para perfilar lo necesario para la cronometrada.
El piloto asturiano sacó lectura positiva a una jornada enrevesada. Está pegado a los McLaren, sobre los que tiene un importante colchón de puntos, así que si no puede ganar como mal menor admitiría una victoria de alguno de los pilotos de la escudería de Woking.
Porque sus inmediatos seguidores en el Mundial, los pilotos de Red Bull, no brillaron en Italia. El alemán Sebastian Vettel (segundo en la clasificación general del campeonato del mundo a 24 puntos de Alonso) y Mark Webber, tercero a 32, fueron decimotercero y undécimo. Fernando sabe que la calificación será fundamental y aceptaría un podio, siempre y cuando Vettel entre por detrás de él.
Pero en su la mente del dos veces campeón del mundo de Fórmula 1 está otra victoria en el trazado italiano de Monza, donde los triunfos siempre son especiales. En territorio Ferrari, escudería de la que el asturiano es el buque insignia. Donde podría ganar por tercera vez. E igualar el cuarto mejor registro de todos los tiempos (31 triunfos), en poder del inglés Nigel Mansell.
MONZA, 14,00. ANTENA3.
