Antonio Colmenero vivió, aunque fuera brevemente, los tiempos felices del Ourense FS, aquellos en los que como segundo del malagueño Pepe Martín los ourensanos se codeaban con los mejores e incluso disputaban la fase final de la Copa de España y las eliminatorias por el título de Liga. Esos tiempos pasaron y desde hace un porrón de años dirige al Carballiño FS, heredero del anti guo Frigoríficos Florindo.
Pero su estancia en el banquillo carballiñés tiene fecha de caducidad. El ciclo está prácticamente gastado. Sólo continuaría si el equipo asciende, y disputa, la división de plata. Es una decisión tomada. Yo me marcharé pero el club seguirá. Quizá hay llegado el momento de afrontar andaduras nuevas, ya sea dentro o fuera de España, o incluso tomar un año sin entrenar, resume al actual seleccionador gallego.
Después de la victoria del sábado en el Paco Chao sobre el Cidade de Narón, por 7-4, los ourensanos se han colocado quintos con diez puntos, pero con un partido menos jugado que los tres primeros, Ferrol, el citado Cidade de Narón y Noia. A la vez de la competición, el club carballiñés recibió recientemente la confirmación de que será la sede de la fase final de la Copa Galicia, que disputarán a finales de enero Lobelle Santiago, Azkar Lugo, ambos equipos de la división de honor, Narón y Ferrol. Todo un lujo.
Una pena lo del Ourense, ¿no le parece?
Pues sí. Y más para mí, que en ese club viví momentos muy buenos. Allí di mis primeros pasos como entrenador y guardo unos recuerdos muy gratos. Fueron buenos tiempos, con Martín como entrenador y Roberto Abad como preparador físico. ¿Dónde anda Martín? Pues en Málaga sigue. Tan pancho.
Se han quedado en Carballiño como único estandarte del fútbol sala ourensano...
Sí, pero el problema es que el fútbol sala está en decadencia, está viviendo un momento turbio. No sólo en Ourense, en toda España salvo casos muy puntuales. Me temo que ha llegado el momento de apostar fuerte y trabajar con la base. Los problemas económicos son muchos y serios y en cualquier momento se acabará la gallina de los huevos de oro, si no se ha acabado ya. Quedan pocos en este deporte de esos que lo viven con locura.
¿Y?
A ver si con la entrada de Javier Lozano a la presidencia de la Liga se consigue reestructurar este deporte, aunque igual ya es demasiado tarde. Hay que hacer tres o cuatro grupos de plata, para rebajar costes. Aun hace una semana desapareció otro equipo en plena competición. No puede ser. Es triste y la desacreditas. Voy más lejos, ahora mismo tiene más nivel la Primera A que la plata. Para un equipo como el Carballiño es ahora más difícil ascender que estar entre los cinco o seis primeros en plata. Es así de crudo pero así de real y de simple.
El COI decidió recientemente que el golf y el rugby a siete sean deportes olímpicos ya en Londres 2012. ¿Y el fútbol sala?
Es difícil de entender, la verdad. Es algo extraño, porque probablemente sea el deporte con más licencias y practicantes. Nos tienen discriminados, o como aún cree mucha gente, en el fútbol sala recala el que no vale para el fútbol, afirmación con la que estoy en absoluto desacuerdo. Yo he hablado con jugadores que venían del fútbol y me confesaban que el fútbol sala es mucho más exigente. Entiendo que no estemos a la altura del fútbol o el baloncesto, pero sí veo que estamos a la par del balonmano, por ejemplo.
¿Qué tal este Carballiño?
Pues me da que nos está pudiendo la ansiedad de tener que estar arriba y jugar bien. Debemos ir paso a paso. La clave va a estar en la solidez defensiva, o más bien en el balance entre defensa y ataque. Iremos para arriba, seguro.
Tienen casi a medio Ourense de los de los buenos tiempos. ¿Está ante la mejor plantilla que ha tenido el Carballiño?
Sí, desde que yo entreno aquí es la mejor. Si la llegamos a tener hace cuatro años nos llevamos la Liga de calle. Ahora el nivel es altísimo. El que más temple tenga y aguante el tirón final será el que se lleve el gato al agua. Yo soy optimista porque somos un equipo difícil de batir.
Pero ¿interesa ascender?
Uf, está complicado. Sería un logro muy bonito, sobre todo por los aficionados, que son muchos y cada vez más, y por el trabajo de todos estos años atrás. Pero ya digo, paso a paso y tiempo al tiempo.
Después de la victoria del sábado en el Paco Chao sobre el Cidade de Narón, por 7-4, los ourensanos se han colocado quintos con diez puntos, pero con un partido menos jugado que los tres primeros, Ferrol, el citado Cidade de Narón y Noia. A la vez de la competición, el club carballiñés recibió recientemente la confirmación de que será la sede de la fase final de la Copa Galicia, que disputarán a finales de enero Lobelle Santiago, Azkar Lugo, ambos equipos de la división de honor, Narón y Ferrol. Todo un lujo.
Una pena lo del Ourense, ¿no le parece?
Pues sí. Y más para mí, que en ese club viví momentos muy buenos. Allí di mis primeros pasos como entrenador y guardo unos recuerdos muy gratos. Fueron buenos tiempos, con Martín como entrenador y Roberto Abad como preparador físico. ¿Dónde anda Martín? Pues en Málaga sigue. Tan pancho.
Se han quedado en Carballiño como único estandarte del fútbol sala ourensano...
Sí, pero el problema es que el fútbol sala está en decadencia, está viviendo un momento turbio. No sólo en Ourense, en toda España salvo casos muy puntuales. Me temo que ha llegado el momento de apostar fuerte y trabajar con la base. Los problemas económicos son muchos y serios y en cualquier momento se acabará la gallina de los huevos de oro, si no se ha acabado ya. Quedan pocos en este deporte de esos que lo viven con locura.
¿Y?
A ver si con la entrada de Javier Lozano a la presidencia de la Liga se consigue reestructurar este deporte, aunque igual ya es demasiado tarde. Hay que hacer tres o cuatro grupos de plata, para rebajar costes. Aun hace una semana desapareció otro equipo en plena competición. No puede ser. Es triste y la desacreditas. Voy más lejos, ahora mismo tiene más nivel la Primera A que la plata. Para un equipo como el Carballiño es ahora más difícil ascender que estar entre los cinco o seis primeros en plata. Es así de crudo pero así de real y de simple.
El COI decidió recientemente que el golf y el rugby a siete sean deportes olímpicos ya en Londres 2012. ¿Y el fútbol sala?
Es difícil de entender, la verdad. Es algo extraño, porque probablemente sea el deporte con más licencias y practicantes. Nos tienen discriminados, o como aún cree mucha gente, en el fútbol sala recala el que no vale para el fútbol, afirmación con la que estoy en absoluto desacuerdo. Yo he hablado con jugadores que venían del fútbol y me confesaban que el fútbol sala es mucho más exigente. Entiendo que no estemos a la altura del fútbol o el baloncesto, pero sí veo que estamos a la par del balonmano, por ejemplo.
¿Qué tal este Carballiño?
Pues me da que nos está pudiendo la ansiedad de tener que estar arriba y jugar bien. Debemos ir paso a paso. La clave va a estar en la solidez defensiva, o más bien en el balance entre defensa y ataque. Iremos para arriba, seguro.
Tienen casi a medio Ourense de los de los buenos tiempos. ¿Está ante la mejor plantilla que ha tenido el Carballiño?
Sí, desde que yo entreno aquí es la mejor. Si la llegamos a tener hace cuatro años nos llevamos la Liga de calle. Ahora el nivel es altísimo. El que más temple tenga y aguante el tirón final será el que se lleve el gato al agua. Yo soy optimista porque somos un equipo difícil de batir.
Pero ¿interesa ascender?
Uf, está complicado. Sería un logro muy bonito, sobre todo por los aficionados, que son muchos y cada vez más, y por el trabajo de todos estos años atrás. Pero ya digo, paso a paso y tiempo al tiempo.
