Comenzó la temporada con casi un pleno de acierto de cara al gol: cinco tantos en las siete primeras jornadas le convirtieron en el máximo artillero del grupo gallego de Tercera, pero después el delantero vasco Eder Díez cedió el protagonismo anotador a otros compañeros. Seis semanas después, en la jornada 13, anotó en O Couto el gol del triunfo del Ourense ante el Ordes (1-0), y dos jornadas después hizo los dos de su equipo en el 2-1 ante el Bergantiños. Era el 20 de noviembre y aquellos dos tantos fueron los últimos logrados por el máximo goleador (8) del conjunto ourensanista.
Ahora, casi tres meses después y tras 10 jornadas sin anotar (se perdió tres partidos por sanción y lesión), y aunque reconoce no sentirse presionado por el hecho de no marcar, cree que va siendo hora de volver a ver puerta: 'No estoy obsesionado por no marcar. Ya pasé la racha en la que metía casi todo lo que tiraba y ahora me toca no ver puerta. Últimamente salgo contento de los partidos, porque el equipo está ganando, pero es cierto que va siendo hora de hacer gol para ayudar todavía más al equipo'.
El delantero vasco reconoce cambios en el sistema de juego tras el cambio de entrenador: 'El equipo siempre fue comprometido y solidario, pero ahora lo es todavía más, se nota a la hora de presionar. Poco a poco vamos aclimatándonos a lo que quiere el nuevo técnico, vamos asimilando el nuevo sistema y en Lalín ya nos encontramos bastante cómodos'.
EL GOL Y LA CELEBRACIÓN
La celebración característica de los goles que marca Eder es una voltereta. El hecho de estar tocado de la rodilla incluso le ha llevado a pensar en cambiarla, 'no vaya a ser que pueda crearme algún problema'. De todas formas, el jugador destaca que su rodilla 'está mejorando, aunque en los entrenos te proteges más, el examen es en el partido, cuando vas con todo'.
El delantero vasco reconoce cambios en el sistema de juego tras el cambio de entrenador: 'El equipo siempre fue comprometido y solidario, pero ahora lo es todavía más, se nota a la hora de presionar. Poco a poco vamos aclimatándonos a lo que quiere el nuevo técnico, vamos asimilando el nuevo sistema y en Lalín ya nos encontramos bastante cómodos'.
EL GOL Y LA CELEBRACIÓN
La celebración característica de los goles que marca Eder es una voltereta. El hecho de estar tocado de la rodilla incluso le ha llevado a pensar en cambiarla, 'no vaya a ser que pueda crearme algún problema'. De todas formas, el jugador destaca que su rodilla 'está mejorando, aunque en los entrenos te proteges más, el examen es en el partido, cuando vas con todo'.
