REPORTAJE

Curiosidades del fútbol ourensano: Desde el lío con un secador hasta el fichaje de Radchenko por el Cortegada

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photo_camera La tierra ha ido perdiendo terreno frente a la superficie sintética.

El deporte rey a nivel provincial se nutre y perdura en el tiempo gracias al arcón de recuerdos que lo hacen imborrable

El fútbol provincial, el más autóctono, regala cada fin de semana un sinfín de anécdotas y curiosidades que le aportan ese encanto y particularidad que lo mantiene vivo cada fin de semana.

No hace mucho tiempo formar parte de un equipo suponía primero tener condiciones y luego pelear el puesto de cara a la cita del domingo. En su mayoría los campos de las categorías provinciales eran en su mayoría de tierra y el barro le otorgaba ese condimento épico cuando las botas acababan enterradas. Pero al regreso de esas 'batallas' quien tenía que lidiar con la ropa era la madre o esposa para primero quitar los restos de arena para no estropear las lavadoras.

Pero los jugadores, como si se tratase de la 'mili', hacían de tripas corazón para sacarse el sudor en las duchas frías donde en pleno invierno donde muchas veces era como meterse en un auténtico frigorífico.

Los directivos son la piedra angular en el mantenimiento de un club, desde captar socios y abonados hasta vender entradas el día del partido, rifas para el siempre codiciado lacón y en el caso del Cortegada, donde había como premio gallinas, ovejas y terneras vivas que aportaban un sonido distinto a los 'berros' y abucheos del público para reclamarle al árbitro o acordarse de su familia.

En Francelos, su actual presidente Ricardo González, recordaba  al infatigable Agustín 'O Caricota', que echó media vida ayudando en la directiva y cuando iba al campo dormía la siesta en la cantina, tomaba unos chupitos y vigilaba las 'toupeiras' para matar a los topos para que no destrozaran el campo de Valboa. Además, se cambiaba los 'chafarices'. Sin duda era un hombre singular".

En lo deportivo, al actual técnico del Velle David Rivo lo que más le impactó en su etapa como jugador "fue la lesión de Arturo en A Manchica, cuando ambos jugábamos e el Polígono y se rompió el tendón rotuliano. Y en el campo de Eiroás visitando al Covadonga le estábamos ganando por un claro 0-4 y fue tremendo acabar perdiendo 5-4. Entre la buena gente que me dio el fútbol, Manolo Deva y el malogrado Sumi, dos centrales que eran durísimos".

El fichaje de Radchenko

La Primera autonómica se ha visto realzada en varios momentos por el aporte de viejas glorias que habían llegado a jugar en la élite del fútbol y que después dieron sus últimos coletazos en esta categoría. Chuchi Hidalgo dijo adiós en una de las mejores finales de Copa Diputación entrenando y jugando en el AD Vilamarín. También lo hizo el portero Miguel Sotelo, extécnico del Taboadela, y en la actualidad Jesús Rodríguez Muiños 'Carolo', en el Razamonde de la Tercera autonómica, la última categoría que le quedaba.

Pero Ismael Fernández, entrenador del Cortegada, recuerda cuando era jugador de este club fueron hasta A Coruña para fichar al ex deportivista Dmitri Radchenko "que estuvo a punto de firmar por el Cortegada siendo yo jugador de la plantilla que entrenaba Manolo Dorado. El ruso le había pedido a los directivos 1.500 euros y casa. Parecía hecho, sin embargo se echó para atrás cuando le comunicaron que el club donde iba a jugar tenía campo de tierra. Dijo no".

El lío con un secador: José Luis Vázquez: "Había un compañero que llevaba secador de pelo".

"En los años 80, el Cortegada  fichó al delantero José, de la zona de Crecente, y al primer entreno llegó con un bolso que parecía que se iba a Alemania. Al ver que en el vestuario no había enchufe le dijo al presidente Humberto De Francisco que se iba ya que él usaba secador de pelo. Al final fue a la casa del presidente a ducharse y secarse el cabello. Al domingo siguiente ya había un enchufe en el vestuario. Fue de los mejores atacantes con los que jugué", dijo José Luis Vázquez.

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