Berto, guardameta del Ourense, se mostró crítico con la dureza del Caravaca y la actitud del colegiado

‘No esperábamos la permisividad del árbitro’

Han pasado dos días del partido decisivo ante el Caravaca pero el guardameta ourensanista Berto continúa sin poder sacárselo de la cabeza: ‘Trato de olvidarlo pero de momento es imposible, sobre todo porque lo teníamos en nuestra mano y al final no pudimos certificar el ascenso’, señala.
Pero más que la derrota, lo que más duele al portero nacido en Ribadavia ha sido la manera en que se produjo: ‘Se han dado un cúmulo de circunstancias como la lesión de Martín, la expulsión de Alex, mi error en el segundo gol y la permisividad del árbitro con la dureza con la que se mostró en todo momento el equipo rival’, añade, y es que reconoce que ‘en el cómputo de los 180 minutos de la eliminatoria si ha habido un equipo superior ese ha sido el Ourense. En el partido jugado en O Couto fuimos mejores y en Caravaca también hasta los últimos 25 minutos’.

Cortar de raíz

Berto tiene claro que en un partido puede haber momentos buenos y malos, y aciertos y errores, pero lo que todavía no logra comprender es la actitud del árbitro: ‘Después de lo que pasó durante la semana, en la que el Caravaca calentó el partido, sabíamos perfectamente lo que iba a hacer el rival, pero lo que no nos esperábamos fue la permisividad del árbitro, es que la mayor parte de los jugadores del Ourense terminamos con los ojos hinchados por los codazos que recibimos. El árbitro debió haber cortado de raíz esas acciones, y la verdad es que pudo haber pasado algo muy grave, parecía que el Caravaca tenía que ascender a cualquier precio y para ello no dudaron en rozar la antideportividad’.

El jueves, la asamblea de Segunda B

El jueves tendrá lugar la asamblea de clubes de Segunda B, en la que se decidirá qué comunidades autónomas conformarán cada uno de los cuatro grupos de la categoría de bronce del fútbol nacional, asamblea a la que el Ourense también mirará de reojo por el affaire del Ciudad de Santiago, pues en caso de desaparecer la plaza debería corresponder al conjunto ourensano.

De desaparecer el club compostelano hay que acudir a la normativa federativa, que indica que ocupará la vacante el equipo con mejor coeficiente (diferencia entre goles a favor y en contra) en la fase de ascenso que pertenezca a la zona geográfica donde se ha originado dicha vacante. Esta pasada temporada el grupo del Ciudad de Santiago estaba formado por equipos gallegos, cántabros, asturianos, castellano-leoneses y vascos. De los ocho equipos eliminados en la tercera y definitiva eliminatoria de ascenso a Segunda B (Binissalem, La Nucia, Los Barrios, Tenerife B, Tenisca, Castillo, Jerez Industrial y Noja, además del Ourense) sólo dos tienen mejor coeficiente que los ourensanos (Castillo y Jerez Industrial) pero su comunidad no pertenecía la última temporada al grupo primero, el del Ciudad de Santiago. Sólo está el Noja, que tiene la misma diferencia de goles que el Ourense (+3), pero sólo anotó cinco en los seis partidos de las tres eliminatorias, por 10 de los ourensanos. Con la reglamentación en la mano, la disolución del Ciudad implicaría el ascenso ourensanista.


Te puede interesar