Los de Luisito derrotan con contundencia al Laudio en Llodio y salvo hecatombe se convertirán el próximo fin de semana en equipo de Segunda B

El Ourense acaricia el ascenso

El ourensano Borja Yebra disputa la pelota con un rival del Laudio. (Foto: Noticias de Álava)
El Ourense dejó prácticamente sentenciada la eliminatoria de ascenso a Segunda B contra el Laudio. 1-3 vencieron los ourensanos, un resultado ganado desde el principio, un resultado que salvo hecatombe de las gordas les hará recuperar la categoría que perdieron hace cuatro años.
Los de Luisito salieron a por el partido desde el comienzo. 'Los jugadores saben que se trata de ser ellos mismos, siendo como somos es como hemos ganado el campeonato. No podemos cambiar ahora nuestra forma de jugar', relataba en la previa el entrenador santiagués. Eso quería y eso hicieron sus futbolistas.
Hacer gol, o goles, fuera era la principal tarea para el primer partido. Sacar un buen resultado, la segunda. Ganar, la tercera. En pocas cabezas entraba la cuarta, dejar prácticamente sentenciada la eliminatoria. Los cuatro puntos fueron cumplidos a rajatabla, el Ourense fue a jugar el mejor partido de la temporada en el momento más preciso.
El Ourense manejó el partido desde el principio. Y pronto llegaron las ocasiones. La falta de gol ha sido un lastre durante la temporada. Cosas del fútbol, en el momento más culminante, los de Luisito fimaron tres. Atrás, el equipo se mantuvo sobrio, sin darle opciones al contrario. Pato estuvo perfectamente arropado por una defensa que rayó la perfección. Sólo ese gol a última hora enturbió mínimamente una victoria que sabe a ascenso.
Se acercaba el descanso cuando Eder adelantaba a los visitantes. La primera parte de la tarea estaba hecha. Un vasco ajustició a unos vascos. Un vizcaíno destrozaba a un conjunto alavés. Porque a los diez minutos de la segunda mitad cazó el segundo. La eliminatoria se ponía de un color rojo intenso.
Un aficionado del Laudio no pudo contenerse, 'el Ourense es el mejor equipo que ha pasado por aquí en muchos años'. El 0-2 ponía alas en las botas de los futbolistas ourensanos, plomo en las de los alaveses. Más pesados aún cuando recibieron el tercero, anotado por Sanginés.
Fiestón, el ascenso era una realidad. Virtual todavía pero imposible tenerlo más a mano. Algún ramalazo tenía que tener el Laudio, debía demostrar que había sido campeón del grupo por algo. Y lo encontró de la mano de Javi Antón a falta de diez minutos.

Cuatro años después
Salvo catástrofe, el Ourense volverá a la Segunda B cuatro años después. A la espera de la suerte que corran Castilla, Albacete, Tenerife o Lugo, un histórico como el Oviedo visitará el campo de O Couto. Atrás quedan muchas amarguras y tres intentos desacertados. El próximo fin de semana será un fin de de fiesta.

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