A LAS 18,30 HORAS EN TVG2

Partido canalla en Avilés

El Ourense afronta una cita con más castigo que recompensa ante un rival que también aspira a una plaza en la promoción de ascenso a Segunda División.

Partido sin red para el Ourense en el Román Suárez Puerta de Avilés.Dos candidatos a soñar hasta el final de temporada en un partido al que el Ourense llega justito de gasolina y empujado al precipicio de los descartes por una de las cuatro primeras plazas. Una nueva prueba de compromiso consigo mismo para una plantilla que ha demostrado su implicación con el proyecto unilateralmente.

La Copa es historia desde el viernes y no volverá a tener cabida hasta mañana. Toca pensar de nuevo en la liga y buscar tres puntos que permitan aferrarse a la lucha con los mejores. El empate sonaría de despedida. La derrota la supondría.

Un partido con quilates en el terreno de juego y marcado con luces y sirenas en la clasificación. No va más.

Llega el Ourense simplificado para Luisito. El técnico tiene poco que decidir por desgracia para él. Las lesiones masacran al equipo y condicionan el once inicial. Los relevos ya que decir. Y con todo el puzzle es casi un jeroglífico. Moisés y Corzo apuntan a repetir en el centro de la defensa pero la duda es saber que pasará con Yebra. Esté o no el mediocentro de Chantada dependerá el sistema inicial y también la posición de Campillo o Alex Fernández.



Pegada arriba

El Ourense sabe que tiene pegada de sobre para hacer daño al Avilés. Más incluso que cuando necesita llevar el peso de los partido. Sin Iker Alegre y sin Gustavo Souto, sigue teniendo la verticalidad de Borja Valle y Javi Hernández, el talento de Noguerol y la referencia para definir o apoyar de Óscar Martínez aunque el delantero tenga que jugar con cinco puntos de sutura.

La clave estará en evitar inicios como el de O Vao. Que el marcador no percuta en la moral de un equipo honrado y ambicioso pero demasiado magullado como para levantarse varias veces de la lona cuando lo golpean.

Ganar en Avilés es clave. Un partido canalla porque no tendrá premio alguno en caso de victoria pero con castigo vital si toca derrota.

El Ourense llega al alza en juego y a eso debe aferrarse también. La mala fortuna ante Marino y Guadalajara no debe hacer dudar a un equipo que ha recuperado sensaciones perdidas incluso en partidos con mejores resultados. Ganar en Avilés sería un empujón impagable. Con la meta cada vez más cerca los esfuerzos cuestan más pero ilusionan el doble.

Toca saber sufrir ante un Avilés capacitado para hacer daño pero a la vez disfrutar con un partido de los que se envidian cuando no se puede aspirar a ellos. No es una final pero sí lo más parecido.

Suárez Puerta, 18,30 h.

Te puede interesar