PRIMERA GALICIA

Soñar no cuesta nada, el Polígono gana el derbi ante el Seixalbo (3-1)

Forcejeo entre Calviño, del Polígono y el artillero Pato, del Seixalbo en procura del balón (foto: Óscar Pinal)
photo_camera Forcejeo entre Calviño, del Polígono y el artillero Pato, del Seixalbo en procura del balón (foto: Óscar Pinal)
El Polígono aprovechó su momento para llevarse el derbi ante un Seixalbo que acabó con nueve y aspira al play off 

El partido entre vecinos se lo adjudicó el Polígono al ganar por 3-1 frente a un Seixalbo que a pesar de jugar buena parte del encuentro en inferioridad numérica, dejó hasta el alma para buscar algo positivo del campo industrial.

La situación se le puso muy pronto de cara al equipo de Pablo Gil, al aprovechar Lin un fallo garrafal del portero al escapar un balón largo de Atiza para transformarse en el 1-0. Sin duda fue un duro mazazo para los visitantes a los que les costó bastante recuperarse y volver a meterse en el partido. De hecho, un esférico de martín para Kevin que, tras recortar a un contrario vio como involuntariamente Pato termina por entorpecer su remate.

El Polígono estaba más cómodo y buscaba abrir las bandas para sorprender, tanto es así que dispuso de tres ocasiones para elevar la diferencia.  Sanmiguel remata un centro de Atiza que despeja Alberto y cuyo rechace le quedó a Viti, que se encontró nuevamente con los reflejos del cancerbero.

Más tarde, una pérdida de balón de Bolaño que le quedó servido a Choupas que dispara desde el borde del área y solventa otra vez Alberto.

Las protestas visitantes por ciertas decisiones del asistente David Guzmán terminaron con la expulsión de Kevin, que complicaría más el panorama a los suyos. Los industriales se abstrajeron de los problemas de su adversario y siguieron buscando la portería contraria.  En el descuento, un pase atrás de Lin que remata Yago y vuelve a controlar el portero, que ya había dejada atrás el error en el único tanto que campeaba en el marcador.  

Mucho más claro lo tuvo Sanmiguel, que con toda la portería a su disposición tiró desviado un pase de Lin.

El descanso le vino muy bien al Seixalbo para tranquilizarse, centrarse de lleno en el encuentro y buscar la forma de llegar al empate. El Polígono salió en la segunda mitad mucho más relajado ante un rival que arriesgó mucho más, hasta que en una jugada que no entrañaba cierto peligro un defensa industrial desestabiliza a Pato dentro del área y uno de los máximos artilleros de la liga fusiló a Alberto con un potente tiro que, tras pegar el balón en la parte interior del larguero, acabó convirtiéndose en el 1-1. Era el premio a la constancia.

Los industriales espabilaron y en una gran recuperación de Ferreiro se marchó de cara a la portería y desde unos 20 metros sacó un potente remate que, tras dar un pequeño bote, sorprendió a Alberto, que se había arrojado con mucho criterio, pero no pudo impedir el 2-1.

El partido entró en una fase donde el Seixalbo se hartó de colgar balones, pero no terminaban de cuajar. En un toma y daca permanente nació el 3-1 para los industriales. La jugada la inició Juan con un balón largo que controló Ferreiro y cuyo posterior toque atrás le quedó a Miguelín, que llevaba dos minutos en el campo, que recortó a un defensa y sacó un estupendo zurdazo que se coló junto a la cepa del palo izquierdo. Más tarde la impotencia de César le costó la roja por la cual pidió perdón a su afición. Celebración por todo lo alto de los industriales, que sentenciaron y todavía sueñan con las plazas de play off

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