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Sufriendo sabe mucho mejor

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photo_camera El defensa del Ourense C.F. Ross avanza con la pelota sobre o Couto.

El Ourense C.F. derrotó al Atios por 2-1 en los instantes finales del partido, como hizo hace una semana en el derbi ante el Verín

 

PRAT
Ourense CF
2
1
COB
Atios

El Ourense C.F. volvió a tener la suerte de cara y, en un final de infarto, logró darle la vuelta al marcador y derrotar al Atios por 2-1.

Y es que los de Fran Justo parece que están abonados a sufrir hasta el pitido final. La pasada jornada ganaron en el derbi al Verín en el descuento y esta vez le dieron la vuelta al partido en los minutos 88 y 89. Aunque lo que queda es el resultado final, y ese fue de victoria.

Porque el partido fue muy discreto y con poco ritmo. El Atios no quería y el Ourense no podía. Los vigueses plantearon el partido al 'tran tran', y los ourensanos se contagiaron. Así es complicado.

Pudo abrir el marcador Andrew para los locales pero su remate en el área, solo, lo mandó fuera al cuarto de hora. Pero a los 22 minutos si que marcó. Aunque en su portería. Fue una jugada personal de Álex Rey, que tras varios recortes, chutó y el balón, tras pegar en Andrew,se coló en la meta de Michi. Y al descanso sin más que contar.

La segunda parte comenzó con un poco más de intensidad en los ourensanos que tenían que darle la vuelta al partido como fuera.

Aunque el Atios perdonó el 0-2. Primero con un disparo de Rafa que devolvió el poste de la portería local y más tarde con una gran intervención del meta Michi que salvó el remate a bocajarro del visitante Asier. Fue la última de los visitantes que se desplomaron sobre el verde de O Couto, ante un Ourense que apretaba, pero que no lograba al menos un empate.

El tramo final fue de locos. En el 78, el defensa Ross, se hizo espacio, tiró y el meta visitante sacó a córner de forma magistral.

Y llegó el descontrol. Minuto 88. Pablo Piñeiro se hace con un balón, avanza y saca un zurdazo que se cuela por la escuadra. 1-1, y al menos un punto. Pues no. Siguiente jugada y repetición. Esta vez con Wadir de protagonista, tiro raso y 2-1 en el 89. No se jugó más, ni falta que hacía. Objetivo cumplido.

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