Sanitarios y personal del PAC de Concejo aseguran que los vagabundos duermen dentro de las instalaciones, sospechan de actividades ilegales en los baños y notan más agresiones
Sanitarios y personal del PAC de Concejo confirman que los vagabundos “se cuelan dentro de las instalaciones”, sospechan de “tráfico de sustancias ilegales en los baños” y notan un “incremento en el número de agresiones”. El personal sanitario del centro asegura que siente “miedo y que la situación mejoraría si se aplicase más seguridad en las puertas de acceso y en el mostrador. Además de intentar incorporar personal de seguridad” para evitar las diferentes situaciones de conflicto que se dan en el edificio.
Infiltrados
Miembros del personal que trabaja en el centro de salud por la mañana (antes de que comience el servicio del PAC a las 15,00 horas) indican que, en su caso, se encuentran vagabundos que “duermen en la entrada o en salas de espera para resguardarse del frío o del calor”. Estos trabajadores, que prefieren no dar su nombre por seguridad, expresan que en estos casos se “procede a llamar a la policía”, pero “si se ponen agresivos puede que no dé tiempo a que vengan”. Además, indican su “indignación” sobre la “falta de seguridad” que hay en la entrada del PAC, ya que “no hay ningún tipo de cerrojo y cualquiera puede infiltrarse en las instalaciones sin que nadie se dé cuenta”. Esto mismo lo corrobora la vicepresidenta de la Comisión de Centro de Atención Primaria, Belén González: “Hay usuarios que se cuelan en el PAC a ciertas horas y pernocta en la zona de rayos, en los bajos del centro”.
Precisamente, el coordinador del PAC, Manuel da Costa, relata que “un día llegamos a encontrar en los bajos a una mujer muerta que se había colado en las instalaciones”. La versión de Da Costa es que esto pasa “desde la apertura del servicio en 2006” y que “la solución reside más en una cuestión de civismo y educación civil que en el aumento de la seguridad”.
"Se cuelan dentro de las instalaciones"
Agresiones y trapicheo
El aumento de la agresividad es otro factor que denuncian estos sanitarios. González y Da Costa indican que “Desde la pandemia se ha ralentizado el servicio y esto provoca la crispación de los pacientes”. La sanidad pública es “universal y no distinguimos apariencia, ideología o procedencia. Lo que implica exponerse a situaciones de agresiones al personal sanitario u a otros pacientes”, relata González. La falta de un sistema de seguridad en el mostrador de dicho servicio, “permite fácilmente el acceso para las personas conflictivas”, concluye.
El tercer tipo de problema que ha notado el personal empleado del PAC es la “sospecha de trapicheo de sustancias ilegales en el baño”, ya que “hay un comportamiento que no se corresponde con el del uso de los aseos, a veces van de dos en dos para, sospechamos, colocarse”. Da Costa indica que los profesionales sanitarios, en estos casos, tienen miedo de “enfrentarse a estos usuarios por miedo a que haya un conflicto”.
Expectativas
La Comisión de Centro de Atención Primaria ha solicitado al subdelegado de Gobierno de Ourense seguridad fuera del edificio. González tiene la “esperanza” de que esta situación se resuelva y piensa que “si circulan policías por las inmediaciones” puede llegar a ser un “punto disuasorio” para que “estas personas no vuelvan”. Por su parte, Da Costa indica que “mientras no haya denuncias judiciales, nadie nos hará caso”.
