El Real Madrid tiene en su mano sellar su pase a octavos de final en San Siro, dar un golpe de efecto en la Liga de Campeones, con la posibilidad incluso de asegurarse el primer puesto, y dejar tocado a un Milán con necesidades urgentes, en el partido entre los dos equipos más laureados de Europa.
Hay deudas históricas. El Real Madrid está ante una de ellas frente a un enemigo íntimo como el Milán, al que tiene la posibilidad de dejar con un pie fuera si rompe sus pésimas estadísticas en San Siro.
Lo hará con José Mourinho a la cabeza. El portugués regresa a un estadio en el que escribió una de las páginas más importantes del Inter de Milán en los dos últimos años y en el que su último referente fue una goleada sonrojante al Milán, su eterno rival (0-4). Peores son los registros del Real Madrid en un estadio en el que nunca ha ganado en competición oficial. Entre los dos equipos de la ciudad ha encajado diez derrotas y solo ha sacado tres empates en sus 13 visitas.
Pero el presente invita al optimismo. El conjunto madrileño llega al partido de las 16 Copas de Europa (nueve el Real Madrid y siete el Milán) sin conocer la derrota y en plena racha de victorias abultadas con Cristiano Ronaldo explotando su cara más goleadora. 11 goles en seis partidos de blanco le convierten en el líder de un equipo que crece a cada partido.
En Europa, tres victorias y ningún gol encajado conducen a Mourinho a pensar en introducir ligeros retoques. Destaca que el prestigio siempre está en juego, pero las ligeras molestias que arrastra Di María y la campaña de cariño hacia Benzema pueden conducir a los cambios. Pedro León se perfila como novedad.
DOS EN UNO
En su mano tiene el Real Madrid clasificarse matemáticamente para los octavos de final e incluso asegurar el primer puesto a falta de dos jornadas. Pero se va a encontrar con un Milán aún con el dolor reciente de la derrota en el Santiago Bernabéu (2-0).
No atraviesa su mejor momento después que la Juventus conquistara San Siro el sábado (1-2) y viendo que en la Liga de Campeones tendrá que pelear en partidos que serán finales ante Ajax y Auxerre por el segundo puesto del grupo.
El conjunto rossonero, que temió en el Bernabéu por una goleada histórica, necesita ganar para seguir dependiendo de sí mismo. Rompió su mala racha como local en Liga de Campeones ante el Auxerre, después que en la pasada edición se despidiese sin ganar un partido en su estadio. Ese triunfo y el empate en Amsterdam ante el Ajax mantienen su esperanza.
Pese a la abundancia de delanteros, los de Allegri sólo han marcado 17 goles en 13 partidos, siete de ellos a cargo del sueco Ibrahimovic.
La gran novedad será la vuelta de Ronaldinho. El ex barcelonista se disputa con su compatriota Robinho y el holandés Seedorf el puesto de apoyo a Ibrahimovic y a Inzaghi, novedad en lugar de Pato. Volverá también el central Thiago Silva, ausente en el Bernabéu y pieza clave como pareja de Nesta.
SAN SIRO, 20,45. TVG.
Milán: Abbiati; Zambrotta, Nesta, Thiago Silva; Gattuso, Pirlo, Boateng; Ronaldinho; Inzaghi e Ibrahimovic.
Real Madrid: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Pedro León o Di María, Özil, Cristiano Ronaldo; e Higuaín.
ÁRBITRO: HOWARD WEBB, INGLÉS.
Lo hará con José Mourinho a la cabeza. El portugués regresa a un estadio en el que escribió una de las páginas más importantes del Inter de Milán en los dos últimos años y en el que su último referente fue una goleada sonrojante al Milán, su eterno rival (0-4). Peores son los registros del Real Madrid en un estadio en el que nunca ha ganado en competición oficial. Entre los dos equipos de la ciudad ha encajado diez derrotas y solo ha sacado tres empates en sus 13 visitas.
Pero el presente invita al optimismo. El conjunto madrileño llega al partido de las 16 Copas de Europa (nueve el Real Madrid y siete el Milán) sin conocer la derrota y en plena racha de victorias abultadas con Cristiano Ronaldo explotando su cara más goleadora. 11 goles en seis partidos de blanco le convierten en el líder de un equipo que crece a cada partido.
En Europa, tres victorias y ningún gol encajado conducen a Mourinho a pensar en introducir ligeros retoques. Destaca que el prestigio siempre está en juego, pero las ligeras molestias que arrastra Di María y la campaña de cariño hacia Benzema pueden conducir a los cambios. Pedro León se perfila como novedad.
DOS EN UNO
En su mano tiene el Real Madrid clasificarse matemáticamente para los octavos de final e incluso asegurar el primer puesto a falta de dos jornadas. Pero se va a encontrar con un Milán aún con el dolor reciente de la derrota en el Santiago Bernabéu (2-0).
No atraviesa su mejor momento después que la Juventus conquistara San Siro el sábado (1-2) y viendo que en la Liga de Campeones tendrá que pelear en partidos que serán finales ante Ajax y Auxerre por el segundo puesto del grupo.
El conjunto rossonero, que temió en el Bernabéu por una goleada histórica, necesita ganar para seguir dependiendo de sí mismo. Rompió su mala racha como local en Liga de Campeones ante el Auxerre, después que en la pasada edición se despidiese sin ganar un partido en su estadio. Ese triunfo y el empate en Amsterdam ante el Ajax mantienen su esperanza.
Pese a la abundancia de delanteros, los de Allegri sólo han marcado 17 goles en 13 partidos, siete de ellos a cargo del sueco Ibrahimovic.
La gran novedad será la vuelta de Ronaldinho. El ex barcelonista se disputa con su compatriota Robinho y el holandés Seedorf el puesto de apoyo a Ibrahimovic y a Inzaghi, novedad en lugar de Pato. Volverá también el central Thiago Silva, ausente en el Bernabéu y pieza clave como pareja de Nesta.
SAN SIRO, 20,45. TVG.
Milán: Abbiati; Zambrotta, Nesta, Thiago Silva; Gattuso, Pirlo, Boateng; Ronaldinho; Inzaghi e Ibrahimovic.
Real Madrid: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Pedro León o Di María, Özil, Cristiano Ronaldo; e Higuaín.
ÁRBITRO: HOWARD WEBB, INGLÉS.
