José García Liñares es el nuevo presidente del fútbol gallego, poniendo fin a una etapa de 18 años con Julio Meana al frente. El traspaso de poderes tuvo lugar en A Coruña con la presencia del presidente de la Española, Ángel María Villar. La derrota de Julio Meana en las últimas elecciones fue asumida como propia por Villar, que no escondió que apoyó al presidente saliente hasta el final.
El dirigente de la Federación española recordó que 'el fútbol gallego ha decidido que haya un nuevo presidente'. Villar afirmó que Liñares es 'un hombre preparado, un hombre de fútbol', y le deseó 'muy buenos resultados' en el proyecto 'ambicioso' que ha iniciado y en el que le recomendó 'tener colaboradores leales'.
'Estoy con el fútbol gallego y lo estaré siempre, aunque se discrepe, como lo he hecho en 22 años con todas las Federaciones autonómicas. Le he dado a cada una de ellas lo que le corresponde', declaró Villar en respuesta a las demandas que minutos antes había realizado el nuevo presidente de la Federación gallega.
García Liñares demandó nuevas sedes para la Federación gallega, recordó que hay un 'dinero que tiene pendiente y que hay que encontrar porque en algún lado estará' y tuvo reproches para su antecesor, Julio Meana. 'No voy a decir que has sido un gran presidente porque yo echaba en falta gestión', remarcó.
'Estoy con el fútbol gallego y lo estaré siempre, aunque se discrepe, como lo he hecho en 22 años con todas las Federaciones autonómicas. Le he dado a cada una de ellas lo que le corresponde', declaró Villar en respuesta a las demandas que minutos antes había realizado el nuevo presidente de la Federación gallega.
García Liñares demandó nuevas sedes para la Federación gallega, recordó que hay un 'dinero que tiene pendiente y que hay que encontrar porque en algún lado estará' y tuvo reproches para su antecesor, Julio Meana. 'No voy a decir que has sido un gran presidente porque yo echaba en falta gestión', remarcó.
