La Policía Local de Ceuta ha detenido a un menor de 16 años implicado en una pelea de perros clandestina que se iba a llevar a cabo anoche en una barriada de la ciudad, un día después de que la Guardia Civil interviniera en otro servicio similar.
Según han informado fuentes policiales, el detenido, identificado como E.E.H., se encontraba en compañía de otro menor, de 14 años, que se dio a la fuga al ver la presencia de los agentes.
E.E.H. se enfrentó a los policías amenazándoles y echándoles los dos perros para que les mordieran, además de amenazar a un guardia civil de paisano que se encontraba en el lugar.
Los perros carecían de cualquier tipo de documentación y pertenecen a las razas consideradas como potencialmente peligrosas por lo que sus dueños deben llevarlos tanto con su seguro correspondiente como con un bozal.
El menor estaba preparando a los perros para una pelea clandestina, exactamente 24 horas después de que la Guardia Civil hubiera practicado otro servicio similar en la misma zona, en la barriada de Juan XXIII.
El detenido había estado con anterioridad en el centro de internamiento de Punta Blanca y tiene antecedentes por amenazas al profesorado.
Los perros, que presentaban varias heridas, tuvieron que ser trasladados por la propia Policía a las dependencias de la Protectora de Animales, en donde se les atendió en la sala de curas de que dispone la entidad.
E.E.H. se enfrentó a los policías amenazándoles y echándoles los dos perros para que les mordieran, además de amenazar a un guardia civil de paisano que se encontraba en el lugar.
Los perros carecían de cualquier tipo de documentación y pertenecen a las razas consideradas como potencialmente peligrosas por lo que sus dueños deben llevarlos tanto con su seguro correspondiente como con un bozal.
El menor estaba preparando a los perros para una pelea clandestina, exactamente 24 horas después de que la Guardia Civil hubiera practicado otro servicio similar en la misma zona, en la barriada de Juan XXIII.
El detenido había estado con anterioridad en el centro de internamiento de Punta Blanca y tiene antecedentes por amenazas al profesorado.
Los perros, que presentaban varias heridas, tuvieron que ser trasladados por la propia Policía a las dependencias de la Protectora de Animales, en donde se les atendió en la sala de curas de que dispone la entidad.
