El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se han reprochado hoy falta de credibilidad ante los españoles y se han enzarzado en la lucha contra la corrupción política echándose en cara casos protagonizados por representantes del PP y de los socialistas.
En el cara a cara que han mantenido en el debate sobre el estado de la nación, Rajoy ha restado autoridad moral a Rubalcaba para que pida dimisiones como la suya recordando que hace poco más de un año el PP consiguió el apoyo mayoritario de los españoles.
Frente a esa victoria, ha subrayado que el PSOE logró el peor resultado desde 1977.
Por ello, ha señalado que a él no le interesa pedir la dimisión de Rubalcaba como secretario general del PSOE, al tiempo que ha garantizado que su Gobierno cumplirá los cuatro años de mandato.
El líder socialista le ha recordado que la gestión que hoy se evalúa en el Congreso es la del presidente del Gobierno, no la suya, y ha considerado insólito que haya sugerido que pueda pedir su dimisión.
Los reproches se han sucedido entre ambos a la hora de analizar las políticas que se están poniendo en marcha, ya que si Rubalcaba ha considerado que están llevando a una España más empobrecida, Rajoy le ha afeado que no pusiera en práctica las propuestas que ahora plantea.
'Tiene usted una historia, y es que habla de lo que nunca hizo e hizo lo contrario de lo que ahora está proponiendo', le ha espetado el presidente del Gobierno para concluir subrayando que Rubalcaba carece de credibilidad.
El secretario general del PSOE ha acusado a Rajoy de haber acudido hoy al Congreso a 'reinventarse' y a dibujar una España distinta a la real.
Ambos han criticado también la escasa disposición de su oponente al diálogo y se han enzarzado a la hora de abordar el problema de la corrupción.
Si el líder socialista ha advertido al presidente del Gobierno de que nadie es impune y que debe dar explicaciones sobre el caso del extesorero del PP Luis Bárcenas, Rajoy le ha recordado que el PSOE fue condenado por financiación ilegal mientras que los populares, hasta el momento, nunca han sido condenados por ello.
Rubalcaba ha recogido el guante y ha dicho que, con esa condena (por el 'caso Filesa'), el PSOE 'aprendió para toda la vida', mientras que el PP, que en aquellos años estaba incurso en otro procedimiento judicial por supuesta financiación ilegal (el 'caso Naseiro') salió indemne del mismo por un 'truco judicial'.
Y ese, a su juicio, es el origen de los problemas de corrupción que actualmente vive el Partido Popular.
'La impunidad no existe y este problema (el caso Bárcenas) va a pesar sobre usted y su Gobierno', ha subrayado el líder socialista.
Ante ello, Rajoy ha lamentado que 'algunos lleven una contabilidad moral separada para sus amigos y otra para los demás. A veces -ha precisado- tiene uno la sensación de que la memoria es la primera prófuga de la política'.
El jefe del Gobierno, quien ha puesto a Andalucía, como ejemplo de la 'demagogia' del PSOE en materia de sanidad, ha advertido a Rubalcaba de que su propuesta de generalizar la dación en pago podría dañar en el futuro el acceso de las familias a las hipotecas.
También ha afeado a los socialistas que siempre respondan con un no a las propuestas del Gobierno, ante lo que el líder de la oposición ha recurrido de nuevo a una comparación con el pasado: 'Somos Teresa de Calcuta. Usted hizo una oposición terrible'.
Frente a esa victoria, ha subrayado que el PSOE logró el peor resultado desde 1977.
Por ello, ha señalado que a él no le interesa pedir la dimisión de Rubalcaba como secretario general del PSOE, al tiempo que ha garantizado que su Gobierno cumplirá los cuatro años de mandato.
El líder socialista le ha recordado que la gestión que hoy se evalúa en el Congreso es la del presidente del Gobierno, no la suya, y ha considerado insólito que haya sugerido que pueda pedir su dimisión.
Los reproches se han sucedido entre ambos a la hora de analizar las políticas que se están poniendo en marcha, ya que si Rubalcaba ha considerado que están llevando a una España más empobrecida, Rajoy le ha afeado que no pusiera en práctica las propuestas que ahora plantea.
'Tiene usted una historia, y es que habla de lo que nunca hizo e hizo lo contrario de lo que ahora está proponiendo', le ha espetado el presidente del Gobierno para concluir subrayando que Rubalcaba carece de credibilidad.
El secretario general del PSOE ha acusado a Rajoy de haber acudido hoy al Congreso a 'reinventarse' y a dibujar una España distinta a la real.
Ambos han criticado también la escasa disposición de su oponente al diálogo y se han enzarzado a la hora de abordar el problema de la corrupción.
Si el líder socialista ha advertido al presidente del Gobierno de que nadie es impune y que debe dar explicaciones sobre el caso del extesorero del PP Luis Bárcenas, Rajoy le ha recordado que el PSOE fue condenado por financiación ilegal mientras que los populares, hasta el momento, nunca han sido condenados por ello.
Rubalcaba ha recogido el guante y ha dicho que, con esa condena (por el 'caso Filesa'), el PSOE 'aprendió para toda la vida', mientras que el PP, que en aquellos años estaba incurso en otro procedimiento judicial por supuesta financiación ilegal (el 'caso Naseiro') salió indemne del mismo por un 'truco judicial'.
Y ese, a su juicio, es el origen de los problemas de corrupción que actualmente vive el Partido Popular.
'La impunidad no existe y este problema (el caso Bárcenas) va a pesar sobre usted y su Gobierno', ha subrayado el líder socialista.
Ante ello, Rajoy ha lamentado que 'algunos lleven una contabilidad moral separada para sus amigos y otra para los demás. A veces -ha precisado- tiene uno la sensación de que la memoria es la primera prófuga de la política'.
El jefe del Gobierno, quien ha puesto a Andalucía, como ejemplo de la 'demagogia' del PSOE en materia de sanidad, ha advertido a Rubalcaba de que su propuesta de generalizar la dación en pago podría dañar en el futuro el acceso de las familias a las hipotecas.
También ha afeado a los socialistas que siempre respondan con un no a las propuestas del Gobierno, ante lo que el líder de la oposición ha recurrido de nuevo a una comparación con el pasado: 'Somos Teresa de Calcuta. Usted hizo una oposición terrible'.
