PP, PSOE y BNG aprobaron hoy por unanimidad que Galicia pueda compartir con el Estado la gestión del espacio radioeléctrico para mejorar los servicios en el medio rural y reclamaron al Gobierno central que en los nuevos procesos de asignación de espectro, como consecuencia del apagón analógico, priorice los servicios a frecuencias para la cobertura del medio rural con banda ancha de calidad.
En la proposición no de ley aprobada, presentada por el BNG y consensuada con socialistas y populares, se pide que se articule en este proceso la participación de las comunidades, tanto en la planificación como en la gestión en los casos en los que el ámbito de cobertura de las emisiones no supere el de la autonomía.
Además, la iniciativa insta a la Xunta a negociar con el Ejecutivo central que Galicia tenga capacidad para disponer de operadores inalámbrico en banda licenciada que resuelvan las carencias, en este caso también de manera especial en los servicios en el rural y zonas dispersas.
El texto solicita que en los futuros cambios reglamentarios de la gestión de espectro se incluya la posibilidad de que el uso de las frecuencias tengan como territorio de asignación una comunidad y no necesariamente todo el Estado, sobre todo en aquellos ámbitos en los que la zona de cobertura de las emisiones pueda definirse de forma que no supere el territorio de la autonomía.
Por otra parte, los tres grupos parlamentarios reclaman que se exija la puesta en producción o se retire la concesión a todas las empresas adjudicatarias de frecuencias susceptibles de mejorar la banda ancha y que no ejecuten las inversiones comprometidas en la oferta remitida al Gobierno.
Finalmente, la proposición no de ley postula a Galicia como sede de la Agencia Estatal de Gestión del Espectro Radioeléctrico, a propuesta del diputado del PP Angel Bernardo Tahoces, que el impulsor de la iniciativa, el nacionalista Fernando Blanco Parga, aceptó aunque precisó que no era la prioridad de este asunto.
