La Xunta ha creado una comisión permanente para garantizar la coordinación de todos sus departamentos a la hora de abordar la integración de la etnia gitana, según anunció hoy el vicepresidente autonómico, Anxo Quintana, tras la reunión de la Comisión Interdepartamental de Loita contra a Pobreza e Exclusión Social.
Así, explicó que este nuevo órgano estará comandado por la Secretaría Xeral de Benestar y contará con la presencia de las consellerías de Educación, de Traballo, de Vivenda, de Política Territorial, de Presidencia y de Sanidade.
Así, explicó que este nuevo órgano estará comandado por la Secretaría Xeral de Benestar y contará con la presencia de las consellerías de Educación, de Traballo, de Vivenda, de Política Territorial, de Presidencia y de Sanidade.
En este sentido, Quintana destacó la importancia de que todas ellas trabajen de manera complementaria para afrontar un problema con varios polos.
De hecho, recalcó que la erradicación del chabolismo no es una cuestión sólo de realojos, sino también sociolaboral, educativa y sanitaria. Por ello, argumentó que el trabajo transversal es la única garantía de éxito para solventar las tensiones creadas en los últimos meses en varios puntos de la comunidad.
Preguntado por la posibilidad de que los poblados de transición para gitanos --que forman parte de su propuesta global-acaben convirtiéndose en nuevos asentamientos estables, admitió que existe ese riesgo porque, a su juicio, no existen soluciones mágicas al respecto.
SIN PLAZOS.
También recalcó que no cuentan con plazos prefijados sobre cuánto tiempo pueden prolongarse estos poblados, lo que justificó en que se trata de personas y en que depende de cada caso.
De este modo, reconoció que cualquier iniciativa en este campo está sujeta a la posibilidad de fracasar. Pero el riesgo consiste en eso precisamente, en dar un paso al frente y en buscar soluciones, reivindicó, y volvió a remarcar que la integración es innegociable en este proceso.
En cualquier caso, insistió en que los poblados no son la pieza fundamental de su plan, sino las comisiones de seguimiento, que ya funcionan en A Coruña, Poio y Ponte Caldelas. Así, puso en valor del trabajo del ayuntamiento coruñés, que consideró ejemplarizante en esta materia, tanto por asumir el liderazgo de la comisión como por el plan trazado.
De hecho, recalcó que la erradicación del chabolismo no es una cuestión sólo de realojos, sino también sociolaboral, educativa y sanitaria. Por ello, argumentó que el trabajo transversal es la única garantía de éxito para solventar las tensiones creadas en los últimos meses en varios puntos de la comunidad.
Preguntado por la posibilidad de que los poblados de transición para gitanos --que forman parte de su propuesta global-acaben convirtiéndose en nuevos asentamientos estables, admitió que existe ese riesgo porque, a su juicio, no existen soluciones mágicas al respecto.
SIN PLAZOS.
También recalcó que no cuentan con plazos prefijados sobre cuánto tiempo pueden prolongarse estos poblados, lo que justificó en que se trata de personas y en que depende de cada caso.
De este modo, reconoció que cualquier iniciativa en este campo está sujeta a la posibilidad de fracasar. Pero el riesgo consiste en eso precisamente, en dar un paso al frente y en buscar soluciones, reivindicó, y volvió a remarcar que la integración es innegociable en este proceso.
En cualquier caso, insistió en que los poblados no son la pieza fundamental de su plan, sino las comisiones de seguimiento, que ya funcionan en A Coruña, Poio y Ponte Caldelas. Así, puso en valor del trabajo del ayuntamiento coruñés, que consideró ejemplarizante en esta materia, tanto por asumir el liderazgo de la comisión como por el plan trazado.
