TECNOLOGÍA

Los jóvenes, cada vez más conectados al móvil y a internet

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El 72% de los españoles de entre 18 y 24 años utiliza su teléfono como dispositivo principal para conectarse a Internet

Los españoles más jóvenes han dejado de lado los ordenadores y portátiles para utilizar de manera generalizada los terminales móviles como principal puerta de entrada a la red.

El 72% de los españoles de entre 18 y 24 años utiliza su teléfono como dispositivo principal para conectarse a Internet, frente al 24,5% de los mayores de 55 años (situándose la media global en un 44,2 por ciento), según datos del III Estudio de Comparación Online hacia el Ahorro Inteligente, que pone de manifiesto el cambio de tendencia en el uso de dispositivos conectados entre la población más joven.

España es uno de los países del mundo con mayor penetración de "smartphones". A cierre de 2016, según datos de la CNMC, existían en el país 51,15 millones de líneas móviles, es decir 110 líneas de telefonía móvil por cada 100 habitantes. El avance de la tecnología y la fácil adaptación y uso de ella en la vida diaria han supuesto un impulso importante para la telefonía móvil y los "smartphones".

Más de la mitad de la población (56%) utiliza de forma activa el móvil al menos tres horas al día, siendo la media de uso 4,24 horas diarias. Sin embargo, existen claras diferencias generacionales; así, mientras que los adultos entre 55 y 65 años lo utilizan 3,01 horas diarias, un 30 por ciento menos que la media nacional, los jóvenes pasan más del doble de horas utilizando el móvil: 6,8 horas diarias.

Sacar mayor provecho a las funcionalidades que ofrece el terminal móvil también es claramente una cuestión de edad, según muestra el informe. En este sentido, el 42,5% de los españoles indica que aprovecha todas las funcionalidades que le ofrece su móvil.

Sin embargo, mientras que el 29,9% de los adultos de más de 55 años sacan provecho a todas las funcionalidades de su móvil, este porcentaje casi se duplica hasta el 56% en el caso de los jóvenes entre 18 y 24 años.

Este mayor uso y dependencia hacia el móvil de los jóvenes hace que le den una importancia fundamental en sus vidas, estando dispuestos a pagar un precio mayor o a contratar determinados productos o tarifas telefónicas que no necesitan, con el único fin de conseguir el terminal asociado a ellas.

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