Verín amaneció este lunes bajo restricciones de nivel medio, tras el incremento de casos activos de coronavirus en el concello -24 casos notificados por el Sergas hoy-, algo que obligó al subcomité clínico a endurecer las restricciones en la villa del Támega.
Esto afecta negativamente en la hostelería de Verín, que ve reducido su aforo: un 30% en interiores y un 50% en exteriores, algo que preocupa a los hosteleros verinenses porque "sempre levamos a peor parte", cuenta una camarera.
Y es que esta mañana, por los diferentes bares de Verín se podían ver a trabajadores cambiando los carteles que indican el aforo del local, al igual que terrazas más reducidas que en los últimos días y más mesas precintadas en el interior de los locales hosteleros.