En la trifulca el acusado llegó a golpear a la víctima con una maza
Un vecino de Vilela, en el municipio de Cualedro, identificado como R.C.A., de 69 años, prestó declaración ante la Guardia Civil como presunto autor de delitos de lesiones y maltrato animal tras atropellar de forma deliberada a un perro y, posteriormente, golpear a su dueño con una maza.
La agresión, al parecer ya se produjo hace unos días, aunque la víctima no cursó la denuncia hasta media mañana del pasado día 8 ante el Instituto Armado, que instruyó diligencias al Juzgado de Instrucción número 1 de Verín.
Ambos vecinos conviven enemistados en la citada localidad. El atropello del perro, que no llegó a morir pero sí presenta lesiones graves en los órganos interiores a causa del impacto, desencadenó una discusión entre ambos que terminó en un forcejeo en plena vía pública.
Según pudo saber este periódico, R.C.A. tenía en su poder una maza y la utilizó para golpear a la víctima, identificada como M.l.l., también de 69 años, provocándole lesiones de carácter leve, un esguince en el dedo gordo de la mano derecha, para lo que precisó atención sanitaria.
El investigado negó inicialmente los hechos que se le acusan ante la Guardia Civil, argumentando que el perro estaba suelto y se le cruzó delante del vehículo sin darle tiempo a poder esquivarlo. El denunciante sostiene lo contrario, alegando que fue a buscarlo de forma intencionada a un margen de la vía pública.
Investigación
La Guardia Civil mantiene una investigación abierta y, tras tomar declaración a agresor y víctima, recaba información entre los vecinos y en el mismo lugar del enfrentamiento y atropello del perro para determinar si hubo o no intencionalidad en el atropello del can, que vienen siendo utilizado para pastorear ganado y como animal de compañía.
Aumento de las agresiones por conflictos vecinales
Las fuerzas de seguridad detectaron durante este año un repunte en los delitos de lesiones por reyertas entre vecinos. Durante los primeros nueve meses de este año, Policía Nacional y Guardia Civil contabilizaron 87 denuncias por agresiones y riñas multitudinarias. Durante el año 2016, se habían registrado 80 casos, según el Ministerio del Interior. Uno de los últimos casos, en la semana pasada en el bar Trisquel de Xinzo, en el que un cliente fracturó un hueso de la muñeca a otro por intentar mediar cuando el presunto agresor estaba insultando y amenazando a la camarera del negocio. Un vecino de la ciudad fue detenido a final del pasado mes por pegar a otro en la praza das Mercedes.
