El Hospital de Chaves (Portugal) oferta cada vez menos servicios a la población. En los últimos años, el Gobierno portugués suprimió maternidad, lo que obliga a las mujeres embarazadas a desplazarse a Verín y Vila Real para dar a luz. Después le tocó el turno al servicio de Medicina Legal y ahora amenaza con eliminar las urgencias médico-quirúrgicas, en las que se incluían las especialidades de cirugía, traumatología, urología, obstetricia y ginecología, además de oftalmología.
El citada hospital es el punto de referencia para los pacientes de Chaves, Montalegre, Valpaços, Vinhais y Boticas (el censo de población es de alrededor de 100.000 persona), que a partir de ahora tendrían que trasladarse a Vila Real (situada a 70 kilómetros) para ser atendidos.
Este traslado es para el Gobierno portugués temporal, dado que en su decisión de suprimir el servicio apeló a la puesta en marcha del proyecto sanitario transfronterizo, que en un futuro convertirá al Hospital de Verín en punto de referencia para los pacientes de la zona portuguesa y de la comarca de Monterrei y Conso Frieiras.
Este proyecto está aún en trámite, tras la firma de un convenio en marzo del año 2011 entre la Consellería de Sanidade y el Ministerio de Saúde portugués. Desde la rúbrica del documento, en el Hospital Comarcal verinense ya fueron atendidas 65 personas con diferentes patologías, según dieron a conocer en el centro.
REACCIONES
El presidente de la Cámara Municipal de Chaves, Joao Martins Batista, ya se reunió en varias ocasiones con el personal sanitario, a los que mostró su rechazo al cierre del servicio de urgencias. El mandatario luso es consciente de que se está gestionando un proyecto para compartir servicios sanitarios con Verín pero, a su entender, esta iniciativa debería servir más para mantener servicios que para desmantelarlos. 'No vamos a consentir que cierren urgencias', apuntó.
La supresión está recogida en un estudio que realizó la Entidad Reguladora da Saúde lusa. Joao Martins Batista está revisando cada uno de los papeles y ya planteó a sus homólogos de Montalegre, Boticas y Vinhais la posibilidad de 'luchar' por que la zona sea declarada como Unidad Local de Saúde do Alto Támega, a través de la que prestarían todos los servicios a la población y, a su entender, favorecería la cooperación con todos los centros sanitarios de la comarca de Monterrei. La constitución de la citada Unidad Local de Saúde do Alto Támega ya fue aprobada hace dos años por el Gobierno luso pero hasta el momento no se puso en marcha por falta de financiación.
Este traslado es para el Gobierno portugués temporal, dado que en su decisión de suprimir el servicio apeló a la puesta en marcha del proyecto sanitario transfronterizo, que en un futuro convertirá al Hospital de Verín en punto de referencia para los pacientes de la zona portuguesa y de la comarca de Monterrei y Conso Frieiras.
Este proyecto está aún en trámite, tras la firma de un convenio en marzo del año 2011 entre la Consellería de Sanidade y el Ministerio de Saúde portugués. Desde la rúbrica del documento, en el Hospital Comarcal verinense ya fueron atendidas 65 personas con diferentes patologías, según dieron a conocer en el centro.
REACCIONES
El presidente de la Cámara Municipal de Chaves, Joao Martins Batista, ya se reunió en varias ocasiones con el personal sanitario, a los que mostró su rechazo al cierre del servicio de urgencias. El mandatario luso es consciente de que se está gestionando un proyecto para compartir servicios sanitarios con Verín pero, a su entender, esta iniciativa debería servir más para mantener servicios que para desmantelarlos. 'No vamos a consentir que cierren urgencias', apuntó.
La supresión está recogida en un estudio que realizó la Entidad Reguladora da Saúde lusa. Joao Martins Batista está revisando cada uno de los papeles y ya planteó a sus homólogos de Montalegre, Boticas y Vinhais la posibilidad de 'luchar' por que la zona sea declarada como Unidad Local de Saúde do Alto Támega, a través de la que prestarían todos los servicios a la población y, a su entender, favorecería la cooperación con todos los centros sanitarios de la comarca de Monterrei. La constitución de la citada Unidad Local de Saúde do Alto Támega ya fue aprobada hace dos años por el Gobierno luso pero hasta el momento no se puso en marcha por falta de financiación.
