En una nave de Vilamartín sustrajeron pollos, aceite y maquinaria y en otra de Laza, una estufa y armarios
Los ladrones no se van de vacaciones. En los últimos tres días han entrado en una vivienda en Arnoia y en otra en Avión, además de en tres almacenes agrícolas, en Laza, Vilarmartín de Valdeorras y el concello de Lobios.
En la vivienda de Arnoia, situada en la zona conocida como A Laxa, se apoderaron de dinero en efectivo, joyas y material óptico, por un importe total de más de 10.000 euros. Los delincuentes accedieron al interior forzando una puerta de la planta baja. Después aprovecharon unas escaleras interiores para recorrer todas las dependencias en las que sustrajeron el dinero y la joyas.
La Guardia Civil inspeccionó el inmueble con el objetivo de encontrar pegadas que permitan identificar a los ladrones. Inicialmente, los agentes trabajan con la hipótesis de que los autores residen en el municipio o poblaciones limítrofes y conocían que los dueños no estaban en la vivienda.
En la casa de Avión utilizaron el mismo modus operandi, aunque en este caso el botín logrado fue mucho menor, un total de 80 euros.
Este es el segundo robo en una vivienda de Avión en menos de una semana. En la primera, tal y como dio a conocer este periódico el pasado día 7 de agosto, sustrajeron 400 euros, 10.000 pesos mexicanos (475 euros), 2.500 dólares (2.220 euros) y joyas valoradas en otros 5.000, entre otros efectos. Los delincuentes se dieron a la fuga en el coche Mercedes que tenían estacionado las víctimas y que está valorado en 176.000 euros. El vehículo aún no fue localizado por las fuerzas de seguridad.
Controles nocturnos
La Guardia Civil intensificó la vigilancia, sobre todo por las noches que es cuando se registran los robos, para detener en cualquier control de carretera a los ladrones.
En el Instituto Armado descartan que detrás de estos robos se esconda una banda organizada que se haya desplazado desde otras partes de España. Sostienen que asaltos como el de Arnoia y en el que robaron 80 euros de una vivienda de Avión fueron perpetrados por delincuentes habituales que suelen residir cerca de las víctimas y conocen sus movimientos. Basan su argumento en los datos recogidos en la inspección de los dos inmuebles.
