Los denunciantes aseguraron que el presunto agresor los esperó en un callejón con dos cuchillos
Una pelea nocturna ocurrida en el pub Beni, ubicado en Entrimo, durante la madrugada del 25 de junio de 2022, llegó ayer a los juzgados de lo penal de Ourense. El acusado de ser el autor de dos agresiones esa noche, David. C.R., aseguró ayer que él no fue el agresor, sino la víctima. “Todos los golpes me los llevé yo”, manifestó.
Sin embargo, los dos denunciantes aseguran que fueron agredidos por David. Uno de ellos explicó que, mientras estaba hablando con su primo, el acusado, al que no conocía de nada, “me agarró por detrás, me tiró al suelo y me metió los dedos en el ojo”.
Su amigo, el otro denunciante, explicó ayer que recriminó estos hechos a David dentro del pub y, según su versión, este le contestó que “me lo podría hacer a mí también”. “Tuvimos una agarrada que provocó que nos cayésemos los dos al suelo, tras lo que a él lo sacan fuera del establecimiento”, afirmó.
Tras este incidente, según explicó el denunciante, David los esperó en un callejón y salió con los brazos en alto portando un cuchillo y una navaja mariposa. “Fui corriendo hacia él, lo tiré al suelo e intenté quitarle los cuchillos, pero no pude. Después me di cuenta de que yo tenía mucha sangre”, indicó. Posteriormente, según los denunciantes, el acusado cogió su vehículo y se fue.
Durante la sesión también declararon tres testigos, amigos de los denunciantes, quienes constataron las versiones dadas previamente sobre cómo se produjeron las presuntas agresiones de David. Asimismo, indicaron que no conocían al acusado antes de que ocurriesen estos hechos.
Incluso una de las testigos afirmó que cuando abandonaba el lugar en su coche, la adelantó una furgoneta similar a la del acusado. “Poco después, me estaba esperando en una curva, se metió en mi carril y vino contra mí, pude esquivarlo y fui a denunciarlo”, añadió.
Además, en el juicio también testificó el guardia civil que detuvo al acusado. En su declaración, explicó que en el coche de David encontraron una navaja y que él tenía la lengua seccionada, por lo que requirió de atención médica para curar las heridas.
Versión del acusado
El acusado, que declaró por videoconferencia desde Córdoba, negó durante el juicio los hechos de los que se le acusa y dijo que él no es el agresor, sino la víctima. “Estaba hablando con una chica, mostrándole vídeos, alguno de ellos se puso celoso y me agredieron”, indicó.
En este sentido, afirmó que “todos los golpes me los llevé yo, me sacaron la navaja y todo, pensé que me iban a matar”. Sobre la navaja encontrada en su vehículo, lo justificó diciendo que se la quitó a sus agresores cuando se les cayó al suelo.
David, que indicó en el juicio que padece esquizofrenia paranoide, utilizó la última palabra para volver a negar los hechos. Además, en ella manifestó que “me pegaron una paliza por ser andaluz, vivía por la zona y me tuve que ir”.
Para él, el Ministerio Fiscal solicita una sentencia condenatoria, mientras que su abogado pide tener en cuenta el derecho a la legítima defensa y tener en consideración los problemas de salud que sufre su cliente.
