Se le acusa de un robo con violencia, agravado por el uso de disfra
Rubén Ramos Márquez aceptó una condena de cuatro años, tres meses y un día de prisión por un robo con violencia, agravado por el uso de disfraz, perpetrado el día uno de diciembre del pasado año en una panadería de la calle Santa Teresita de la ciudad. La fiscal rebajó la pena inicialmente interesada (cinco años de prisión) al aplicarle una atenuante de drogadicción.
El inculpado reconoció que a las 11.30 horas entró en la panadería Roberto Rivela de O Vinteún, tapándose la boca con una braga de cuello, y esgrimió un cuchillo a la dependienta para que le entregar el dinero. De esta forma, se apoderó de 30 euros en billetes y 100 euros en monedas para posteriormente darse a la fuga con el dinero y el cajetín de la máquina registradora.
En el momento de la detención, el inculpado aún llevaba consigo 20 euros en billetes que se le entregaron a la empleada del establecimiento asaltado.