El presidente de la Diputación de Ourense rechazó la solicitud de los portavoces de PSdeG y BNG.
Baltar hizo esta afirmación en una comparecencia pública ante los medios de comunicación al concluir la primera reunión de trabajo para analizar el Código Ético, primero con que cuente un gobierno provincial en España, a propuesta del propio presidente provincial.
En sus declaraciones, el presidente de la diputación orensana criticó la postura de la oposición a este respecto tras asegurar que desde el 24 de febrero, fecha en que fue presentada la propuesta para elaboración de código conducta tanto para cargos electos como para el personal, "hasta el día de hoy ni una sola aportación" por parte de estos dos grupos.
Baltar recordó que en sesión plenaria el PSdeG votó a favor y el BNG se abstuvo, por lo que no hubo ningún voto en contra.
En este sentido, criticó la postura de los socialistas en el día de hoy de plantear "cuestiones innegociables en un grupo de trabajo que se va a negociar" así como la del BNG, quien "pretendía que para conocer sus aportaciones, que fueron 0, se forzase las dimisiones de diputados provinciales".
"Evidentemente ese es un juego político demagógico que no entra en la forma de pensar del presidente y del grupo PP", advirtió Baltar, quien recalcó que no hay "ningún diputado imputado en la institución provincial por cuestiones derivadas de su ejercicio".
"En estos temas tenemos que ser muy prudentes porque recientemente tuvimos el caso de un alcalde que, después de estar imputado, fue absuelto", haciendo alusión al alcalde de Baltar, José Antonio Feijoo, quien fue absuelto de un delito de coacciones.
El presidente provincial recordó que "un código ético de una institución no es un código penal", por lo que recalcó que estas cuestiones "tienen que regularse a través de los códigos éticos de las propias formaciones políticas".
A pesar del abandono de la oposición de las reuniones, ha ratificado que se mantienen las reuniones para seguir adelante con la tramitación del código tras dejar claro que el objetivo no es "sacar tajada política sino pensar exclusivamente en el funcionamiento que rige la ética y la conducta de la institución provincial".
Los portavoces de PSdeG y BNG habían requerido esta mañana que fuesen apartados de sus funciones los diputados imputados en causas judiciales en aras de la "transparencia", situación que ha sido rechazada por la diputación al entender que no es competencia del órgano provincial.
