EN OURENSE

La Cámara se vuelve camarote

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photo_camera En la sede cameral trabajan 16 empleados, pero cinco de ellos están de baja.

La Cámara de Comercio mantiene una simulada actividad. Sus gestores se han dado a la fuga y la Consellería de Industria aún no ha intervenido. El silencio se adueña de la sede y todo está a media luz, como la entidad.

La Cámara de Comercio mantiene sus horarios, que no es lo mismo que su actividad. Abierta desde las 08,30 a 14,30 y de 16,00 a 20,00 horas, de lunes a jueves. Los viernes la jornada matinal se mantiene, pero por la tarde está cerrada. En los casi 900 metros cuadrados de la sede de la Avenida de la Habana el eco de los pasos por el pasillo rebota en las paredes porque el silencio ha ganado espacio al bullicio. En las épocas en las que los empleados de la Cámara eran casi como funcionarios de alto rango llegó a haber 24 trabajadores.

Un Expediente de Regulación de Empleo hizo cirugía cruenta y hoy quedan 16 empleados. Lo de decir quedan es simulado, porque en estos momentos están de baja cinco, por lo tanto el resto van a cumplir sus horarios tanto a la oficina principal como en las Antenas de Verín y O Barco de Valdeorras y al Vivero de Empresas del Parque Tecnolóxico.

La Cámara de Comercio tiene actividad, pero es la del día a día, ya que la entidad "trabaja sin proyecto, no hay futuro, no se sabe qué habrá en unas semanas", dicen fuentes de este organismo. Los trabajadores escapan de las fotos porque se han convertido en noticia a su pesar. Buena parte de ellos, luego de estar esperando cinco meses a cobrar, han decidido presentar reclamaciones judiciales e incluso se han ventilado ya algunos casos en el Servicio de Mediación y Arbitraje laboral. Esperarán acontecimientos. Esperar es la palabra.

¿Y el usuario que demanda los servicios de la entidad? La Cámara de Comercio es una oficina en servicios mínimos, sin proyecto, pero con el compromiso que le viene dado por ley de que debe prestar servicios a los empresarios. Si una empresa viene a pedir un Certificado de Origen para exportar, se le facilita; si acude a solicitar cualquier diligencia para exportar, se le despacha; si viene a alquilar el salón de actos o un aula, se le atiende. Pero poco más.

Por la puerta hay poco movimiento, tanto de entrada como de salida y las bisagras crujen cada vez más. Es la misma puerta que siguen franqueando los pocos vocales que aún quedan en la centenaria entidad pero para firmar la renuncia. Según el último recuento hecho ayer, de los 30 miembros del pleno solo quedan cinco para mantener la llama. El resto ha rubricado un papel para finiquitar su presencia en el pleno, lo que es tanto como administrar la extremaunción al enfermo.

La Cámara de Comercio está ahora en fase involutiva y lo que en tiempos fue una sólida institución hoy se ha quedado en un humilde camarote de una nave con problemas en la línea de flotación.

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